Hay dos destinos que Renfe tiene que tener en cuenta para su AVE y para el Avlo si quiere entrar del todo al mercado internacional. Lógicamente, estos son aquellos que pasan o terminan en los países fronterizos al mercado español, es decir Portugal y Francia. Aunque están acelerando sus pasos para instalarse con fuerza en Francia la ruta a Portugal aún tardará un tiempo.
Por ello el vicepresidente de Infraestructuras del Gobierno de Portugal, Carlos Fernández, ha asegurado que espera que el AVE entre el país luso y Galicia esté listo en 2030, pero remarca que para ello es necesario que se defina con España una «estrategia» y se articule un «calendario».
«Estamos razonablemente convencidas las dos partes (Portugal y España) de que hay un compromiso político para avanzar», ha manifestado sobre la conexión de alta velocidad con Galicia, en una entrevista concedida a Onda Cero.
Ha apuntado que en esa estrategia debe figurar el nuevo puente sobre el río Miño para poder optar a financiación. Así, Portugal ya tiene hechos los estudios ambientales de su parte y su propuesta de localización es la misma que trazaron en un proyecto inicial hace 10 años, pero que después quedó en un cajón por la crisis. Ahora, esperan que España también concrete.
Paralelamente, Carlos Fernandes considera que la salida sur de Vigo es «esencial», y ha relatado que las actuaciones a ambos lados de la frontera avanzan «más o menos al mismo ritmo», al tiempo que la interlocución con Adif siempre ha sido «fácil».
CARRERA DEL GOBIERNO Y RENFE PARA CUMPLIR LOS OBJETIVOS
Por su lado desde El Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana se han dado pasos para acelerar este proceso. El Ministerio ha creado una delegación permanente para el seguimiento y actualización del plan director del Corredor Atlántico, tanto del estado de las infraestructuras como de las políticas del Gobierno en alianza con Europa, destacando las conexiones con Portugal y Francia.
El objetivo es agilizar el despliegue de la infraestructura y sus servicios para potenciar el transporte de mercancías por tren en España y las conexiones con Europa, para lo cual ha nombrado a un comisionado, José Antonio Sebastián, hasta ahora gerente de Material de Renfe Mercancías.
«La decisión reafirma el compromiso del Ministerio y el Gobierno con el desarrollo de una infraestructura que considerada prioritaria para la economía española y para la descarbonización del transporte de mercancías, un objetivo clave para avanzar en la lucha contra el cambio climático y reducir la dependencia de los combustibles fósiles», defiende el Ministerio.
El comisionado tendrá como principal reto garantizar que se aprovecha la oportunidad de los fondos europeos de recuperación NextGenerationEU para ampliar y completar el Corredor Atlántico, que solo a este proyecto destina más de 2.477 millones de euros.
Así, el comisionado tiene previsto convocar una primera reunión de alto nivel en Asturias con los principales actores del Corredor Atlántico, también del sector privado, para poner en común las necesidades y prioridades de la infraestructura ferroviaria.
FRANCIA ANTES DE FIN DE AÑO
Aunque la ruta a Portugal todavía tendrá que esperar un tiempo, aun con la nueva inversión y las solicitudes desde el país vecino, el caso francés es muy distinto. Ya Renfe ha empezado pruebas pilotos en rutas a Marsella y Lyon y tras el encuentro en Barcelona entre Pedro Sánchez y Emmanuel Macron se anunció que esperan llegar a París antes del que termine este año.
Es que, además de funcionar como destino clave es la apertura al resto del continente. Es un cronómetro al que cada vez le queda menos, y que dejaría a los trenes españoles competir de tú a tú, y con precios menores, con las aerolíneas. Si bien durante mucho tiempo el gobierno francés había puesto dificultades las reuniones recientes habían engrasado el proceso.
Tocará esperar como funciona esta línea francesa, y ver el efecto que puede tener en los planes portugueses. Ambos tardarán al menos unos meses, así que habrá que seguirlos de cerca.
