Cellnex Telecom ha anunciado que ha llegado a un acuerdo -sujeto a la aprobación de la Autoridad Francesa de la Competencia (“FCA”) – para la cesión de un paquete de unos 3.200 emplazamientos a Phoenix Tower International (“PTI”) para cumplir con las condiciones de cierre establecidas por la FCA tras la compra de Hivory que Cellnex llevó a cabo en 2021.
PTI adquirirá 1.226 emplazamientos de telecomunicaciones ubicados en áreas muy densas en Francia, mientras que simultáneamente, a través de su joint venture con Bouygues Telecom adquirirá 2.000 emplazamientos adicionales en zonas igualmente muy densas.
“Los acuerdos alcanzados tanto con PTI como con su joint venture con Bouygues Telecom nos permiten cumplir con los requisitos establecidos por la Autoridad de la Competencia francesa tras completar la adquisición de Hivory el pasado mes de octubre. Ambos acuerdos refuerzan la lógica del modelo de negocio basado en la gestión neutral e independiente de las infraestructuras de telecomunicaciones y, por tanto, representan un paso más en la consolidación de este modelo en Francia y en Europa”.
Àlex Mestre, Vice Consejero Delegado de Cellnex Telecom.
La compañía cerró el ejercicio 2021 con crecimientos del 63% en Ebitda y del 61% en cash-flow libre recurrente. En 2021 Cellnex cerró operaciones de crecimiento en Francia (Hivory), Austria, Dinamarca, Irlanda, Italia y Suecia (CK Hutchison), Polonia (Play y Polkomtel Infrastruktura) y Países Bajos (emplazamientos de TMobile NL) con una inversión asociada de 18.800 millones de euros. Adicionalmente durante los últimos meses Cellnex ha alcanzado nuevos acuerdos de crecimiento en Francia, Portugal, Reino Unido y Países Bajos con una inversión acumulada de 1.900 millones de euros.
Cellnex en gráfico
A nivel técnico, Cellnex marcó su máximo histórico en agosto de 2021, tras un crecimiento del 531% desde 2017. Tras dicho máximo, el precio pasó a bajista, cayendo con fuerza al inicio de 2022. Actualmente el precio se mueve alcista, tras rebotar en el soporte clave de los 40 euros. La proyección para el corto plazo es alcista, con los 45 euros como objetivo, justo donde se sitúa la línea de tendencia bajista.
