Si después de mucho pensarlo has decidido lanzarte a la aventura de ser autónomo, hay unos pasos básicos que no puedes pasar por alto, como el alta en el RETA y en Hacienda. Pero además de los trámites legales, necesitas dotarte de una serie de herramientas para poder afrontar el inicio de tu negocio con éxito.
Los materiales y otros elementos que vas a necesitar dependen mucho de la actividad que vayas a desarrollar, pero existe una infraestructura básica que debes de tener sí o sí con independencia de a qué vayas a dedicarte. Coge lápiz y papel porque vamos a contártelo todo, así arrancarás tu experiencia emprendedora de la mejor forma posible.
1Una cuenta corriente para tu actividad como autónomo
Entre los grandes errores que suelen cometer quienes emprenden por primera vez está el no separar el dinero de su negocio de su dinero particular. Esto es un fallo importante, porque como autónomo vas a tener que hacer frente al pago de múltiples impuestos y además vas a recibir dinero por parte de tus clientes. Si juntas tu dinero particular con el dinero de tu negocio al final no sabrás de donde viene cada partida.
Para que esto no suceda, lo primero que tienes que hacer es abrir una cuenta que utilizarás únicamente para tu negocio, para todos los ingresos y los gastos que tengan que ver con él. Así te resultará mucho más sencillo gestionar la contabilidad. Puedes optar por una cuenta negocios, que está especialmente pensada para profesionales, pero también puedes abrir una cuenta normal y corriente, eso queda a tu elección.
