Gran parte de España permanece confinada en sus casas después de que el Gobierno decretase, hace ya más de una semana, el Estado de alarma. El coronavirus ha golpeado con dureza nuestro país, donde los infectados rozan los 50.000 y son ya casi 3.500 los fallecidos. Cifras desoladoras que se espera que remitan con el transcurso de los días. Sin embargo, no todas las actividades han cesado. Muchas obras siguen en pie sin respetar el protocolo para evitar el contagio del Covid-19.
Unas empresas han seguido las directrices y han apostado por el teletrabajo. Otros negocios, como los bares, restaurantes y otros comercios que no son de alimentación o de productos básicos, han tenido que echar el cierre. Sin embargo, y pese a las recomendaciones, es una realidad: los obreros siguen expuestos al coronavirus. Pero más allá de que persistan algunas obras (un tercio de los madrileños siguen yendo a trabajar), el problema es que no se usan las medidas de seguridad.
1ALGUNAS OBRAS CONTINÚAN
Sí, está claro que gran parte de las obras se han detenido. Pero de la misma forma que muchas personas se echan a la calle y las multas se acumulan, se han podido ver imágenes estos días que llaman mucho la atención. Personas que aprovechan la cuarentena hasta para reformar un local. Algo que ha desatado el enfado de muchos. Y es que, como defiende Íñigo Errejón, muchos españoles prefieren que cese toda actividad que de verdad no sea de urgencia. Y es que compañías como Amazon aún envían productos que no son de primera necesidad. Pero lo peor, son las obras a gran escala en las que como van a ver, no hay mascarillas ni distancia de seguridad.