«Carmena aprueba Los Berrocales»; «se desbloquea uno de los desarrollos urbanístico del Sureste» o «se libera el suelo para construir 22.000 viviendas». Estas son tres de las mentiras que se han podido leer y escuchar durante los últimos días alrededor de los desarrollos de Los Berrocales. ¿La verdad? No habrá una sola grúa en los próximos tres años.
La realidad es que ahora mismo el convenio de gestión ha de aprobarlo el Pleno del Ayuntamiento de Madrid del próximo mes de marzo», afirma a MERCA2 Joaquín Gómez, gerente de la Junta de Compensación de los Berrocales. Así de tajante y de prudente se muestra Gómez. Esta es la única certeza que existe sobre este proyecto del Sureste de Madrid. De momento, no hay viviendas a la vista y no se las espera.
«Tras la aprobación del consistorio necesito otro año para elaborar la reparcelación, otro más para gestionarlo con el Ayuntamiento y un tercero para que sea una certeza en el registro a la propiedad. Sólo superado esos trámites se podrán comprar y vender parcelas para construir vivienda», explica Gómez.
Las palabras del gerente de la Junta de Compensación de Los Berrocales rebajan la euforia generada con la noticia del supuesto desbloqueo de la situación. Pero la realidad es que no existe tal desbloqueo y lo único que se ha dado es un paso más para llegar a tan ansiado objetivo. Además, Gómez reconoce que los próximos comicios autonómicos «afectarán» en el futuro desarrollo urbanístico de la zona.
«Para afianzar un cambio hay que empezarlo al comienzo de la Legislatura, porque como tardes en tramitarlo te atropellan las elecciones municipales y todo puede cambiar en cuestión de meses», afirma Gómez. Un temor que comparte -en este caso una promotora- en el Norte de Madrid.
De todos modos, el gerente de la Junta de Compensación de Los Berrocales explica que «ya es muy difícil» que se caiga el proyecto, a pesar de se pueda producir un supuesto cambio de Gobierno. De momento, el Gobierno de Manuela Carmena, alcaldesa de la ciudad, ha aprobado el convenio urbanístico, un documento que llevaba en el aire tres años, pero que ha de ser ratificado por el Pleno. Un gran paso, pero no el definitivo.
La mentira está en el verdadero significado de la aprobación de este convenio, porque lo tangible -es decir, las grúas para construir- no llegarán hasta al menos el año 2022. O lo que es lo mismo, hasta casi el último año de la próxima legislatura los madrileños no podrán comprobar como arranca la mayor bolsa de suelo de la capital. De hecho, las previsiones hablan de 22.000 viviendas a desarrollar hasta el año 2034.
Pero es precisamente en el baile de cifras donde reside otra de las grandes mentiras o medio verdades que se han relatado en los últimos días. Porque el futuro más inmediato -y si se cumplen los plazos de los tres años- ‘sólo’ se podrán construir 4.500 viviendas en una primera fase y otras 5.500 después. Menos de la mitad de la cifra que se anuncia a bombo y platillo de las 22.000.
A pesar de ser un pequeño pasito, el gerente de la Junta de Compensación sí admite que ha supuesto que surjan los primeros intereses por unos suelos que tienen 250 propietarios. «Hace unos meses por aquí no se acercaba a preguntar nadie», afirma Gómez. Además, el gerente presume de tener todo listo y preparado para la construcción de viviendas.
UNA INVERSIÓN DE 190 MILLONES DE EUROS
El barrio se esbozó a finales de los años noventa y comenzó a avanzar desde 2007 con la urbanización y construcción de infraestructuras. Unos avances que han tenido un coste de 190 millones de euros. «Tenemos 16 kilómetros de saneamiento, siete kilómetros de galerías subterráneas, hemos removido las tierras y una conexión por carretera con la A-3», afirma Gómez.
En realidad, lo que le falta a Los Berrocales -además de las viviendas- es el tejido urbano, la pavimentación y la construcción de las redes eléctricas. La Junta de Compensación tiene permiso para acometer estas actuaciones, pero no quiere dar pasos en falso e invertir más dinero hasta que las grúas no entren en tres años. «Es como hacer coches para no venderlos», espeta Gómez.
LA PARALIZACIÓN INFLA UN 25% EL PRECIO DE LA VIVIENDA
Desbloquear de manera definitiva Los Berrocales no es sólo una obligación, sino una necesidad a tenor de los últimos números registrados en al Sur de Madrid. El coste de las viviendas aumentan al mismo ritmo que los solares comienzan a cosechar malas hiervas. Los desarrollos del Sureste son el remedio a esta inflación, pero su futuro es incierto. El proyecto está estancado y corre peligro de convertirse en la nueva ‘operación Chamartín’, que ha tardado más de 20 años en ver la luz.
El Ensanche de Vallecas está prácticamente agotado puesto que ya tiene el 88% edificado y El Cañaveral es el desarrollo con disponibilidad de oferta que avanza a mayor velocidad. Éste registra unas ventas de más de 1.500 viviendas al año. El Cañaveral es, por lo tanto, el ámbito que actualmente copa la oferta de suelo en Madrid, dado el agotamiento del Ensanche. Esto ha derivado en un incremento mayor de los precios motivado por esta alta demanda llegando a incrementarse un 25% de media anual, lo que implica que ha dejado de ser vivienda accesible barata.
