La calidad del sueño y el descanso es tan importante para la salud como levar una buena alimentación. Es algo que afecta tanto a nivel físico como psicológico, de hecho, un sueño insuficiente mantenido en el tiempo tiene consecuencias muy negativas sobre el cerebro, el estado de ánimo y el organismo en general, además de debilitar el sistema inmune y favorecer la aparición de enfermedades.
De hecho las personas que padecen insomnio familiar fatal, un trastorno raro de origen hereditario, apenas sobreviven unos 18 meses desde de que se desencadenan los primeros síntomas. Hasta ese punto es importante dormir bien.
IMPORTANCIA DE DORMIR BIEN

Una mala noche provoca que pasemos el día con somnolencia, cansancio, pensamiento lento, dificultad para mantener la concentración y la atención, además de una mayor irritabilidad. Si los malos hábitos se prolongan con el tiempo, pueden aparecer enfermedades psicológicas como la ansiedad y la depresión.
Así pues, tener un sueño reparador y sin interrupciones es fundamental para una jornada productiva y feliz. Pero no solo nos afecta la calidad de nuestro sueño, la postura que tomamos para dormir, también puede beneficiarnos más o menos.
LA PEOR POSTURA ES BOCA ABAJO

Uno estudio publicado en la revista The Journal of Neuroscience afirma que lo mejor para el organismo es dormir de lado. Por el contrario, otras investigaciones señalan que la peor opción es dormir boca abajo, ya que esta posición hace que se ejerza demasiada presión en el cuerpo, sobre todo en la zona cervical. La columna vertebral se ve sometida a un estrés que puede derivar en problemas de cervicalgia, lumbalgia o tendinitis.
MUJERES EMBARAZADAS Y PERSONAS CON APNEA

Por otra parte, algunas personas son más vulnerables por sus características particulares, y les pude afectar en gran medida la postura en la que se colocan para dormir. Es el caso de las mujeres embarazadas, las personas con apnea del sueño o las que padecen insomnio.
Este grupo de personas deben tener especial cuidado y tener mayor conciencia de la posición que adoptan en la cama para dormir, ayudándose, si es necesario, de elementos como cojines y almohadones extra para una mayor comodidad.
DE LADO Y USANDO COJINES

Según la recomendación de los investigadores, las mujeres embarazadas deberían dormir sobre el lado izquierdo. Esta postura facilita la irrigación sanguínea y permite que los flujos gástricos circulen sin presión. Además, dormir de lado, alivia la presión en la zona lumbar y es la posición más indicada para disfrutar de un sueño reparador.
En las últimas etapas del embarazo, se puede utilizar un cojín bajo la barriga para que sostenga su peso. También se aconseja colocar un cojín entre as rodillas para mantener la cadera bien alineada.
MEJOR DORMIR DEL LADO IZQUIERDO

Si se duerme de lado o en posición fetal, lo mejor es hacerlo sobre el lado izquierdo. Los expertos aseguran que colocarse sobre este lado es más beneficioso porque alinea la columna vertebral, ya que evita la presión sanguínea. Además, puede aliviar problemas como los ronquidos provocados por la apnea del sueño y otras dificultades respiratorias. También facilita el proceso digestivo y estimula el drenaje glinfático que se encarga de limpiar los desechos del sistema nervioso central.
BOCA ARRIBA TAMBIÉN ES BENEFICIOSO

Dormir boca arriba también puede ser beneficioso. De hecho es una postura ideal para equilibrar el peso del cuerpo y mantener los órganos alineados. Si se usa una almohada adecuada, previene el dolor de cuello y espalda. En este caso, también es buena idea colocar una pequeña almohada bajo las rodillas para que la espalda mantenga una perfecta alineación y no se ejerza presión sobre la zona lumbar. Esta postura es la más adecuada para personas que sufren reflujo estomacal o acidez, ya que si la cabeza está un poco más elevada en relación al estómago, los contenidos gástricos no llegan a elevarse hacia el esófago o la garganta.
HÁBITOS PARA DORMIR BIEN

Para una buena calidad del sueño hay que mantener determinados hábitos. Por ejemplo, conviene cenar dos o tres horas antes de acostarse y no tomar bebidas estimulantes o alcohol a partir de la tarde. También se recomienda apagar dispositivos y pantallas una hora antes de dormir, ya que la luz azul que emiten, activan el cerebro. Es el momento ideal para coger un libro, escuchar la radio, hacer un crucigrama… Tampoco se recomienda hacer deporte después de las 19 horas, ya el ejercicio hace que el cerebro segregue adrenalina y que el cuerpo se active demasiado.
NO POSPONER LA ALARMA

Los expertos recomiendan que evitemos la costumbre de posponer la alarma por la mañana. Por mucho que cueste, lo mejor es levantarse en cuanto suena. Esos minutos de más pueden provocar que nos levantemos con más somnolencia, ya que estamos permitiendo que el cerebro inicie un nuevo ciclo de sueño, que al final se va a interrumpir abruptamente. En cuanto a las siestas, son un hábito saludable, mejora la salud y el humor para continuar con la tarde, pero no se deben hacer más allá de las 17 horas y con una duración máxima de 20 o 30 minutos.