La algarroba se utilizó originalmente como alimento para el ganado, pero tiene un lugar en nuestra mesa tanto por su sabor como por su carácter. El problema es que cada vez es más caro, de hecho se ha quintuplicado este año; pagando 20 céntimos el kilo, ahora es más de 1 euro el kilo. Solo hay que mirar los casos de robos relacionados con esta fruta en los últimos meses para concluir que los amigos extranjeros también conocen bien las propiedades y los precios del «superalimento». Por ejemplo, en agosto de este año, la Guardia Nacional de Valencia detuvo a siete personas por más de 52 toneladas de algarrobas por valor de más de 54.000 euros.

El problema con la algarroba
El problema de la algarroba es que el rendimiento es menor, lo que aumenta el precio en el mercado. Además, se utiliza no solo como alimento directo, sino también como espesante de alimentos, alimento para animales, harina para la elaboración de chocolate e incluso en cosmética. España es el primer productor mundial, y la Comunidad Valenciana es una de las mayores cosechadoras.

Baja en grasa
Dulces y aptas para diabéticos, las algarrobas contienen un contenido de grasa muy bajo del 1 %, en comparación con el 15 % al 30 % del cacao de los supermercados. También es un alimento local porque nuestro país es el mayor productor del mundo y el cacao suele ser importado. Varios estudios, como el realizado por expertos del CEBAS-CSIC y publicado en la Revista AIMS de Agricultura y Alimentación, confirman que las algarrobas son un «superalimento» con beneficios para la salud.

Investigaciones sobre la algarroba
Específicamente, el estudio se refiere al D-pinitol, un compuesto natural relacionado con el importante grupo del inositol. Señala que aunque se han desarrollado métodos sintéticos para este elemento, las algarrobas son la única materia prima a partir de la cual se puede aislar D-pinitol en cantidades suficientes para un uso comercial viable.

HARINA DE ALGARROBA EN HIPERCOR

¿Conoces la harina de algarroba? Es posible que no ya que, realmente, no es un producto demasiado común en el carro de la compra. La harina de algarroba se obtiene, como bien dice su nombre, del algarrobo y es una opción estupenda para cocinar pasteles. ¿Por qué? Pues porque tiene cierto sabor a chocolate que evitará que tengas que poner mucha cantidad de endulzante. La harina de algarroba ya lo endulzará.
Además, la harina de algarroba puede ser usada como chocolate (podrás hacerte un chocolate a la taza sin azúcares añadidos) o para los smoothies. Con tan solo media cucharada le dará un sabor muy especial. La harina de algarroba siempre suele proceder de agricultura ecológica y, en esta ocasión, no iba a ser menos. Su precio también es bastante bueno, 1,79 por cada bolsa de 350 gramos.
Una muy buena alternativa

El tofu es uno de esos productos que al principio no resulta muy apetecible pero que cuanto más lo consumes, más lo necesitas. Ten en cuenta que, en principio, el tofu natural apenas tiene sabor, es más, si te lo comes tal cual te podrá recordar al queso fresco, pero es un producto muy moldeable, por lo que es uno de los preferidos de los vegetarianos.
Puedes hacer una revuelto de tofu, tiras de tofu marinadas, tofu al curry…, existen cientos de recetas con este producto y es por eso mismo por lo que se vuelve un imprescindible. Además, hay que añadir que es un producto rico en fibra y bajo en calorías. ¿Qué más se le puede pedir? Pues que tenga un precio asequible y, por raro que parezca, el bio tofu de Hipercor lo tiene. Tan solo 1,95 euros por cada 250 gramos.
BIO TORTITAS DE ARROZ Y QUINOA PARA PICAR

A todos nos gusta picar de vez en cuando, ¿No es cierto? Aunque esta práctica no sea la mejor para mantener el tipo durante todo el año. Es por eso por lo que siempre es recomendable tener en casa estas tortitas bio de arroz y quinoa que sirven para matar el gusanillo y que apenas tienen calorías.
Lo mejor es que las tortitas bio son muy moldeables, al igual que el tofu. Puedes hacer un snack salado con un poco de pavo encima o un snack dulce si le pones un poco de mantequilla de cacahuete bio y natural. El resultado, en ambos casos, es espléndido. Lo mejor es que también es un producto bastante barato. El paquete cuesta tan solo 1,54 euros.
BIO HAMBURGUESA VEGETAL DE BRÓCOLI EN HIPERCOR

¿Estás cansado de las mismas hamburguesas de siempre? Pues pásate por la sección sana de Hipercor y disfruta de una nueva variedad de hamburguesas que seguro que no te dejan indiferentes. Nosotros recomendamos la bio hamburguesa vegetal de brócoli sin gluten que no tiene ni una pizca de carne. Son bastante sabrosas y muy sanas ya que no tienen apenas calorías.
¿De qué están hechas si no llevan carne?, te preguntarás. Las hamburguesas vegetales de Hipercor están hechas de tofu, ese alimento versátil que se puede convertir en cualquier cosa. El precio es de 2,45 euros cada pack de dos hamburguesas, que no está nada mal si pensamos que, además, son ecológicas.