Uno de los momentos destacados de este miércoles en ‘Supervivientes 2024’ fue el reencuentro entre Ángel Cristo Jr y su novia, Ana Herminia, quien viajó a Honduras para sorprenderlo y animarlo después de más de un mes en el reality. Este emotivo encuentro estuvo marcado por las lágrimas, ya que ninguno de los dos pudo contenerlas desde el momento en que se vieron. Ana ha viajado hasta Honduras para reunirse con su novio, Ángel Cristo Junior.
Después de resolver algunas diferencias con Marieta, Miri y Gorka, Ana finalmente ha vuelto a ver a Ángel Cristo. La pareja ha protagonizado uno de los momentos más románticos en la historia de ‘Supervivientes’, ¡no han parado de besarse! Tras aclarar algunas cosas con Marieta, Miri y Gorka, Ana finalmente se ha reunido con su novio.
LA VISITA DE LA SEMANA EN SUPERVIVIENTES

La nuera de Bárbara Rey había anticipado su viaje a los Cayos Cochinos con gran ilusión por abrazarlo. El hermano de Sofía Cristo está atravesando un momento difícil, siendo uno de los focos del concurso debido a sus conflictos con los compañeros. Sin embargo, ese mismo día recibió la noticia de que había sido salvado de la expulsión, lo que significa que cuenta con el respaldo del público por otra semana más.
La organización del programa no facilitaría el encuentro entre la pareja sin antes superar una serie de pruebas típicas en este tipo de visitas. Antes de ello, Ana Herminia tuvo la oportunidad de resolver algunos conflictos pendientes de su pareja con Marieta, Miri o Gorka.
ANA HERMINIA CONFRONTA A MARIETA

La pareja de Ángel Cristo, uno de los concursantes más comentados de esta edición de Supervivientes, se encontró con Marieta y Miri antes de reunirse con su gran amor. Con el letrero de ‘Un circo bárbaro’ de fondo y subida a un taburete con el látigo en mano como una domadora, no hubo formalidades y el choque fue inmediato desde el primer intercambio de palabras: «Hay algo que me llamó mucho la atención, que es que quieres que me deje y él se quede sin boda», recriminó Herminia.
Marieta, lejos de retractarse, argumentó que Ángel Cristo es una persona obsesionada con el dinero: «Lo pienso porque Ángel, como han dicho mis compañeros, solo habla de que su ceremonia va a costar 40.000 euros, y realmente no tengo nada en contra tuya. Solo de lo que él dice”.
MARIETA DEJA LAS COSAS MUY CLARAS

Marieta dejó en claro que no hay ninguna atracción entre Ángel y ella. Ana aclaró que no se refería a esos comentarios, sino más bien al hecho de que Marieta había expresado anteriormente que sería una fantasía dormir junto a Ángel Cristo. «¿Crees que me gusta él? ¿Crees que quiero casarme con él? Es una forma de hablar.
Cuando digo que parece que le gusto, es porque parece que está esperando para discutir conmigo», respondió Marieta. Después del tenso momento entre ambas, Miri se subió al taburete y Ana Herminia tuvo otra conversación con ella, aunque no fue tan acalorada como con la ex concursante de La Isla de Las Tentaciones.
UN MOMENTO MUY ROMÁNTICO

Después, fue el hijo de la vedette quien se separó de sus compañeros. La presentadora Laura Madrueño le vendó los ojos para que no pudiera ver lo que ocurría a su alrededor. Le explicó el juego: tenía que responder cinco preguntas para avanzar sobre la arena. Si las acertaba todas, podría quitarse la venda de los ojos y descubrir qué le esperaba.
Después de muchas lágrimas, besos y abrazos, el presentador le preguntó por sus sentimientos. «Siento muchas cosas, pero cuando la toco, siento paz. Es lo más importante en mi vida, no puedo explicarlo, tendríamos que hacer otro programa. He tardado muchos años en sentirlo de verdad, nunca lo había sentido antes. Uno no lo sabe hasta que ocurre. Ahora que tengo a Ana, sé que nunca había estado enamorado antes», declaró el hijo del domador de fieras.
ÁNGEL CRISTO SE QUIERE CASAR

A pesar de esto, la posibilidad de una propuesta de matrimonio estaba en el aire, ya que Ángel lo había mencionado en varias conversaciones con sus compañeros. Por ello, Carlos Sobera también le preguntó al respecto. «Ya lo he dicho muchas veces, pero ella sabe que quiero casarme con ella y pasar el resto de mi vida juntos. No me he separado de ella desde hace un año», comentó. Sin embargo, ambos expresaron que no necesitan un anillo ni una gran propuesta para hacerlo oficial, dejando todo para cuando regresen a España.
Durante la cena, Carlos Sobera ha vuelto a conectar en directo con Ángel Cristo y Ana para preguntarles si estarían dispuestos a casarse ¡en Honduras! Ambos aceptaron la propuesta de inmediato, y Ángel Cristo se arrodilló en la playa de los Cayos Cochinos para hacer la propuesta oficial a su novia: “Amor de mi vida, ¿quieres casarte conmigo?”. Ana respondió rápidamente con un «sí, quiero», y sellarán su compromiso en la gala del próximo domingo. ¡No te pierdas la boda de Ángel Cristo y Ana en ‘Supervivientes’!
LA SALUD DE CLAUDIA

Otro de los temas que suscitaba gran expectación antes de la gala de ‘Supervivientes 2024’, conducida por Carlos Sobera, era la decisión del equipo médico del programa respecto a Claudia Martínez. La concursante fue evacuada de la playa hace algunos días debido a intensos dolores estomacales. Los médicos optaron por trasladarla del lugar donde convivía con sus compañeros para someterla a pruebas y determinar su capacidad para continuar en el programa.
La decisión que se ha tomado es esperar un poco más para determinar si Claudia Martínez puede continuar en el concurso o no. Esto se debe a que aún falta conocer los resultados de una prueba crucial. Carlos Sobera explicó que la paciente está estable y está empezando a tolerar la dieta, y se han realizado análisis de sangre y ecografía abdominal.
Sin embargo, están a la espera del resultado de la serología para el helicobacter, que será determinante para decidir su continuidad en el programa. Claudia Martínez ha reaccionado con resignación al enterarse de esta situación, agradeciendo la información mientras espera ansiosa conocer la decisión final. No está claro si esta determinación se conocerá durante la gala que presenta Jorge Javier Vázquez esta noche o si habrá que esperar un poco más para saber el desenlace.