Los datos recrudecen la guerra entre los afectados por el Nolotil y Sanidad

Los afectados por Nolotil en España han respondido al comunicado de la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (Aemps), que ha emitido después de que varios medios de comunicación, entre ellos, MERCA2, se hicieran eco de la demanda judicial que le ha interpuesto la Asociación de Afectados por Fármacos (ADAF). Desde el Bufete Almodóvar & Jara, que es quién está llevando el caso, aseguran que «la Agencia niega la mayor y responde desde el titular de que no va a hacer nada, es decir, la Aemps mantiene las recomendaciones para prevenir el riesgo de agranulocitosis». Esto significa que se ratifica en su postura desde el año 2018, que es cuando lanzó el primer comunicado respecto a este asunto.

Sin embargo, los abogados del caso  insisten es que esta es la respuesta que mantienen una y otra vez desde el organismo dependiente del Ministerio de Sanidad: «Le pedimos a Sanidad que haga su trabajo de proteger la salud pública de los efectos secundarios, que pueden ser mortales -como la propia Aemps reconoce-, del medicamento». Igualmente, ADAF ha verificado a MERCA2 que desde que se ha empezado a hablar con más intensidad de esta situación han aparecido nuevos casos de españoles afectados por Nolotil.

NOLOTIL Y SANIDAD

En este nuevo comunicado lanzado el pasado 1 de diciembre, la Aemps asegura que recientemente ha realizado una evaluación de la nueva información disponible desde la primera revisión que se hizo sobre  la situación de metamizol (el principio activo del Nolotil) en España y que se publicó 2018. «Para ello, ha analizado la evolución del consumo de metamizol, los datos de notificación espontánea de casos de agranulocitosis y la literatura científica publicada en este período. Además, siguiendo las recomendaciones emitidas por el Comité de Seguridad de Medicamentos de Uso Humano de la Aemps (CSMH) celebrado en septiembre de 2018, se ha realizado un estudio farmacoepidemiológico en la base de datos BIFAP (Base de datos para la Investigación Farmacoepidemiológica en el Ámbito Público), que está pendiente de publicación», informan desde la Agencia.

«Como conclusión preliminar, este estudio confirma que la incidencia de agranulocitosis entre los pacientes que inician tratamiento con metamizol es muy baja, en el rango de 1 a 10 casos por millón de personas usuarias, en una población de pacientes representativa de la práctica clínica real en España, incluidos pacientes que estaban en tratamientos durante varias semanas», aclara el organismo en el comunicado.

Qué es el nolotil

De este modo la Aemps concluye que, en base a la revisión de toda la información disponible, no existen nuevos hallazgos que cambien el perfil del riesgo de agranulocitosis ya conocido para metamizol. Igualmente, añade que esta revisión se trató en el seno del CSMH celebrado en octubre de 2023, en el que se ratificó la conclusión del CSMH de octubre de 2018, y se dictaminó que «no existe nueva información que cambie el perfil de este riesgo ya conocido para metamizol». 

Desde el bufete de abogados aseguran que si la Agencia tenía hecha esa nueva revisión, «el asunto es grave pues no la habría comunicado y además ha esperado a que estallara el escándalo para hacerlo, pues su última comunicación ¡es de octubre de 2018!»

La prensa británica, se hizo eco de esta realidad algo que, en opinión del bufete, puede haber provocado la reacción del organismo de Sanidad: «Si lo que pretende la Aemps es hacernos creer que esa revisión la ha hecho entre el domingo que surge la polémica con la publicación sobre Nolotil por parte del diario británico The Guardian, y el viernes que emitió su nota informativa, entonces es que toma por tonta a la población. La Agencia dice que el medicamento está ‘sujeto a prescripción médica’, y es cierto, pero no se cumple, como ‘The Guardian’ y ‘The Observer’ han documentado».

Por su parte ADAF, dice que ha comprobado en diferentes ocasiones que cualquier persona puede comprar el fármaco en una farmacia sin receta

«Cualquier persona puede comprarlo sin receta en una farmacia».

La institución concluyó en 2018 que el número de casos notificados en los últimos años se había incrementado paralelamente al aumento del consumo de este analgésico Agencia Española de Medicamentos. «Tristemente ha sido así, pero la agencia no hizo ni ha hecho nada más. Y sus responsables saben perfectamente, porque han sido advertidos por escrito por ADAF durante todos estos años, que el problema era grave y va en aumento».

AFECTADOS ESPAÑOLES

Desde la asociación de afectados por Nolotil, aseguran que la institución dependiente de Sanidad, se centra en el problema que tiene la población británica y del norte de Europa con el metamizol, como si no ocurriera lo mismo con la ciudadanía española. ADAF puede documentar decenas de casos nuevos de daños sufridos por la población española y a raíz de la publicación del asunto en los medios está recibiendo más casos de afectados españoles, aseguran.

Así lo ha transmitido a MERCA2, la presidenta de ADAF, Cristina García del Campo: «En estos últimos días, desde que salió a la luz todo esto, he recibido alrededor de 50 nuevos casos todos de españoles y unos 30 son de agranulocitosis. En Suecia prohibieron metamizol permanentemente tras haber recibido siete notificaciones de agranulocitosis en cuatro años, entre 1995 y 1999, y en España, donde he notificado más de 100 casos en cuatro años, es decir, en el mismo periodo de tiempo, siguen diciendo que es seguro». 

Reacción alérgica al Nolotil

Por otro lado, la presidenta de ADAF, asegura que seguramente la Aemps haya realizado la revisión de la información disponible desde el año 2018: «No dudamos que sea cierto, pero es evidente que no ha contado con los casos que tiene registrados ADAF. Esta asociación nunca ha recibido petición alguna de la Agencia para conocer los datos que barajamos. Así que sus conclusiones difícilmente pueden ser creíbles. Y aunque asegura que no existen nuevos hallazgos que cambien el perfil del riesgo de agranulocitosis para metamizol, lo cierto es que sí existen, pero insistimos: no los quiere ver», finaliza la portavoz de ADAF.