La Confederación Nacional de la Industria, la principal asociación de empresas industriales de Brasil, ha revisado al alza en 1,2 puntos porcentuales su previsión de crecimiento del Producto Interior Bruto (PIB) de Brasil para este año, al 3,3% desde el 2,1% proyectado durante el segundo trimestre de 2023.
Según el informe de coyuntura económica divulgado este miércoles, correspondiente a las estimaciones del tercer trimestre, Brasil está en camino de crecer más de lo esperado, aunque este efecto no tenga alcance en todos los sectores económicos.
Desde el inicio del año, la CNI ha revisado al alza en 2,1 puntos porcentuales su proyección para el PIB de 2023. En el primer trimestre, se esperaba una expansión del 1,2%, que ha sido mejorada debido al buen desempeño trimestre a trimestre de la actividad brasileña.
El comportamiento del sector industrial será bastante «heterogéneo», con un crecimiento del 2% para esta actividad económica. El resultado positivo vendrá impulsado por la industria extractiva, la industria de la construcción y los servicios públicos industriales.
A su vez, las buenas cosechas de soja y maíz garantizarán un desempeño muy positivo para el PIB del sector agrícola, que se espera que crezca un 15,5% en 2023.
El sector servicios, que ha sido el principal responsable del crecimiento económico en el primer semestre de 2023, crecerá un 2,1%, lo que supone una revisión al alza de 0,9 puntos porcentuales.
La mejora de las expectativas para la economía brasileña por parte de la CNI coincide con el análisis que han realizado en los últimos días importantes organismos internacionales como el Banco Mundial o el Fondo Monetario Internacional (FMI). Ambas instituciones han elevado su proyección por encima del 3%.
INFLACIÓN Y TIPOS DE INTERÉS
En la evaluación de la CNI, la inflación seguirá por la senda de desaceleración, con las expectativas cercanas a la meta, lo que indica un proceso de convergencia en 2024 y, sobre todo, en 2025. La inflación debería finalizar 2023 en un 4,9%. El valor es inferior al observado en 2022, del 5,8%, pero es superior a la meta de inflación del 3,25% para 2023.
En este escenario de desaceleración de la inflación, el Comité de Política Monetaria (Copom) del Banco Central de Brasil ha iniciado inició en agosto el ciclo de recortes de la tasa de interés.
El CNI estima que el organismo realizará dos recortes más de 0,5 puntos porcentuales en las próximas dos reuniones restantes del comité del año, lo que provocará que los tipos acaben en el 11,75% al cierre del año.