Comprar una casa o un piso es un proceso complejo y caro, lo que hace que los particulares que toman la decisión de hacerse con su propio hogar tengan que pensarlo muy bien y disponer de una cantidad de ahorros suficientes.
Al coste que el promotor o dueño anterior quiera poner a la propiedad hay que sumar otra serie de gastos como los costos de escrituración de viviendas, los impuestos y otro tipo de pagos asociados que no se pueden evitar y que hay que abonar convenientemente para que la casa cambie definitivamente de manos.
Quienes están habituados a comprar o vender inmuebles tienen muy claro qué pagos asociados a la adquisición de un inmueble tienen que hacer. Sin embargo, esto no está tan claro para quienes lo hacen por primera vez. Repasamos todo lo que hay que tener en cuenta cuando se están viendo inmuebles para comprar.
La escritura ante notario
La escritura ante notario es un paso fundamental y obligatorio que hay que dar cada vez que se lleva a cabo la compra de una vivienda. En este proceso, el profesional legal da fe de que la promotora o el particular propietario traspasa su inmueble al comprador.
Este proceso tiene un coste aproximado del 0,5 por ciento del coste de venta de la vivienda. A esto habrá que sumar unos pagos adicionales por la copia de la escritura, que no suelen superar, en estos momentos, los 50 euros.
Los impuestos
Cualquier compraventa que se produzca en territorio español debe estar sujeto a unos impuestos que se abonan a la Tesorería Pública. En el caso de las viviendas, la situación será distinta dependiendo de si se trata de una propiedad de segunda mano o nueva:
- Las viviendas nuevas están asociadas a un IVA del 10 %, a lo que hay que sumar un impuesto sobre actos jurídicos documentados, que se grava al 1,5 % del coste total de la vivienda en las comunidades autónomas que más alto lo tienen.
- Las viviendas de segunda mano solo precisan que el comprador abone el ITP, que se sitúa en unos valores que oscilan entre el 4 por ciento y el 10 por ciento, dependiendo de la comunidad autónoma donde se haga la transacción.
El registro de la propiedad
El registro de la propiedad es un protocolo que oficializa la compraventa y vincula el nombre del comprador al inmueble de manera pública. Esto también implica un pago que se sitúa entre el 0,1 y el 0,25 % del coste de la vivienda.
Las asesorías, los agentes inmobiliarios y otros gastos posibles
Además de los gastos fijos señalados, pueden darse escenarios en los que el comprador debe pagar gastos a las asesorías —sobre todo en caso de contar con hipoteca—, mediación de agentes inmobiliarios y cualquier otro servicio del que se haga uso a la hora de valorar la compra, como la obtención de un certificado energético, una revisión del estado real de la vivienda, etc.
Estos son los principales desembolsos que una persona tendrá que hacer siempre que compre una vivienda.
Por eso, antes de lanzarse a buscar un nuevo hogar, los asesores y agentes inmobiliarios aconsejan contar con un presupuesto que tenga en cuenta los costos de escrituración de viviendas y el resto de los indicados, para no llevarse luego desagradables sorpresas que aumenten el gasto previsto.