La Declaración de la renta es un trámite tributario que realizan las personas físicas y jurídicas para informar a la Hacienda Pública sobre sus ingresos y gastos durante el año fiscal anterior. Esta declaración es obligatoria para todas las personas que hayan obtenido ingresos durante el año, ya sea por salarios, inversiones o cualquier otra actividad económica. En ella se deben incluir todos los ingresos obtenidos, las deducciones fiscales y cualquier otra información relevante para el cálculo del impuesto correspondiente. Sin embargo, es posible llegar a ahorrar hasta 3.500 euros a la hora de hacerla. ¿Quieres saber cómo? Pues entonces sigue leyendo, porque te los explicamos a continuación.