El conflicto del aceite de girasol: Alcampo el más barato, Carrefour el más caro

La histeria ha vuelto a nuestras vidas. Si el confinamiento trajo consigo dejas vacías las baldas de papel higiénico de los supermercados, la guerra en Ucrania ha ocasionado lo mismo, pero con el aceite de girasol. De esto se están aprovechando las cadenas de distribución, que han duplicado el precio de este oro líquido.

Si te has paseado por las calles de los diferentes supermercados españoles habrás podido ver que las estanterías donde se ubica las botellas y garrafas de aceite de girasol están vacías. Además, en el caso de haber podido encontrar alguna, su precio se ha disparado hasta alcanzar cifras completamente desorbitadas.

Pero, ¿a qué se debe todo esto? El resumen sencillo es decir que es una de las consecuencias de la invasión de Rusia a Ucrania. Sin embargo, entender cómo hemos llegado a esta situación requiere una explicación más pormenorizada de los acontecimientos.

Desde el pasado fin de semana, algunas cadenas de supermercados comenzaron a limitar la compra de botellas de este líquido. Ante esta situación, la Asociación Española de Distribuidores, Autoservicios y Supermercados emitió un comunicado el pasado lunes para intentar tranquilizar a la población y analizar el momento que se está viviendo.

OCU y Facua se han mostrado contrarias a la restricción de las ventas de aceite de girasol

«Algunas empresas de distribución alimentaria están adoptando medidas de limitación de venta de aceite de girasol debido al comportamiento atípico del consumidor que se ha producido en las últimas horas», expone ASEDAS. Además, añade que «la demanda anómala afecta a un número muy limitado de productos relacionados con el aceite de girasol procedente de Ucrania y existen alternativas tanto de origen como de producto».

NO HABRÁ DESABASTECIMIENTO DE ACEITE DE GIRASOL

La alerta, sobre plano, es natural. España compra el 60% del girasol a Ucrania, así como el 30% del cereal, el que se usa para los piensos de los animales, entre otras cosas. Algo que, para ASEDAS, «carece de sentido en un país como el nuestro, con una cadena sólida como ya demostró al principio de la pandemia». La asociación argumenta que «España es primer productor mundial en varias de las familias de productos que componen las categorías de grasas vegetales».

Ante esta situación, ASEDAS afirma también que existen alternativas y recuerda que España es el primer productor mundial en varias de las familias de productos que integran las categorías de grasas vegetales. «Tanto la Unión Europea como el Gobierno de España están adoptando medidas para paliar esta situación concreta. La cadena alimentaria española es extraordinariamente eficiente y tiene suficiente capacidad para proveer al mercado de dichos productos».

A pesar de este intento de calmar las aguas por parte de esta asociación, la realidad es que el precio del aceite de girasol está por las nubes. En lo que va de año, el precio de este alimento ha subido más de un 13% en lo que va de año. Una situación que reafirma la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación, que asegura que este es uno de los productos que más ha elevado su precio en los últimos tiempos.

Sobre plano, los primeros afectados por esta subida son los supermercados. Si a ellos les cuesta más comprar estas botellas, por lógica, el precio que va a pagar el consumidor debe de subir. Sin embargo, parece que estas cadenas están aprovechando el momento para elevar los precios por encima de lo estimado.

ENCARECIMIENTO EN LOS SUPERMERCADOS

MERCA2 ha analizado el precio en tres de los principales supermercados españoles: Mercadona, Alcampo y Carrefour. La diferencia de precio entre ellas es más que abismal, lo que está haciendo saltar a los consumidores a través de las redes sociales por la desorbitada situación.

Según ha podido comprobar este medio, la compañía francesa del pájaro rojo tiene este líquido en oferta hasta el 15 de marzo. El precio de cada botella de litro se sitúa en los 1,59 euros. La garrafa de 5 litros también sorprende por su bajo precio, con un coste de 8,94 euros.

En un punto medio se encuentra Mercadona, con un precio por litro de 2,50 euros. Sin embargo, es la marca valenciana la que más críticas se ha llevado por parte de la audiencia. Según publican algunos consumidores, «Mercadona sube el aceite de girasol, la garrafa de 5l, de 7 a 13 euros en una semana. Un aceite ya almacenado y pagado al precio anterior. Están especulando y aprovechando». Más allá de este comentario, es cierto que antes de esta crisis el precio del litro en la cadena de Juan Roig estaba en el 1,80.

Por encima del precio de Mercadona está Carrefour. La compañía francesa cobra el litro a 2,80 euros. Para dosificar su venta, estos supermercados han limitado su venta. A los tres supermercados se les acusa de lo mismo, aprovecharse de subir los precios a pesar de que el aceite de girasol de sus lineales proviene de España y Argentina.

Ante esta situación, la Organización de Consumidores y Usuarios ha aclarado que no debería existir una escasez de este producto en los supermercados, ya que el que se vende actualmente procede de la cosecha del pasado verano. De hecho, la OCU cree que no debería llegar a producirse ese déficit, ya que hasta la siguiente cosecha «podría impulsarse la producción nacional» o comercializarse otros aceites vegetales «asequibles», entre los que destaca el aceite de soja, el de colza o el orujo de oliva y recuerda que España es el primer productor mundial de aceite de oliva.

Además, tanto la OCU como Facua se han mostrado contrarias a la restricción de las ventas de aceite de girasol que están practicando varias cadenas de supermercados. «Genera una creciente alarma entre los consumidores y favorece, por lo tanto, la subida de su precio. Un precio que viene ya incrementándose notablemente desde el año pasado por circunstancias ajenas a la guerra de Ucrania», indica la OCU en un comunicado. Además, la OCU ha recordado que está prohibido limitar la cantidad de artículos que un comprador puede adquirir, tal y como se concreta en el artículo 9.2 de la Ley del Comercio Minorista.

Lidia Vega
Lidia Vega
Redactora de economía y empresas especializada en Distribución, Alimentación y Consumo