La firma automovilística Toyota parará la actividad en todas sus plantas en Japón este martes debido a que uno de sus proveedores fue afectado por un presunto ciberataque, provocando la paralización del sistema de gestión de suministro de piezas.
El fabricante explicó ayer en un comunicado que suspenderían el funcionamiento de 28 líneas en 14 plantas de Japón y está aún examinando si podrá volver a la normalidad mañana miércoles en sus factorías nacionales.
«Pedimos disculpas a nuestros proveedores y clientes por las molestias que esto pueda causar. Seguiremos trabajando con nuestros proveedores para reforzar la cadena de suministro y haremos todo lo posible para entregar los vehículos a nuestros clientes lo antes posible», ha comentado Toyota.
El cierre de todas las plantas afectará a la producción de unos 10.000 vehículos, o alrededor del 5% de la producción mensual de Toyota en Japón.
El proveedor, según ha confirmado la compañía, es Kojima Industries, empresa que no cotiza en Bolsa y que se dedica a la fabricación de piezas metálicas, electrónicas y de plástico.