Los tragos más duros que ha pasado Letizia desde su matrimonio

La Casa Real española no es tan perfecta como puede verse muchas veces. Ese mundo idílico de Reyes y Reinas tiene muchos secretos que pocas veces salen a la luz pública. Pero vaya, entre cielo y tierra no hay nada oculto. Por eso es que cada uno de los detalles que giran en torno a Letizia y al Rey Felipe VI, siempre van a despertar la curiosidad de la audiencia. Estamos hablando de dos figuras importantes e influyentes en España, y que su mensaje trasciende fronteras.

Esto nadie lo puede poner en duda. Lo que sí se puede poner en duda es esa perfección en el matrimonio que han tenido estos dos personajes a lo largo de los años, quienes desde que decidieron darse el “sí, quiero”, han tenido que pasar por muchos momentos complicados. Por un lado tenemos un Rey que es la cabeza de la Realeza, y por otro, está Letizia que de por sí tiene una personalidad complicada, y en diversas actuaciones ha recibido regaños por parte de Felipe VI, porque sencillamente no es de las que suele cumplir las reglas.

Los momentos alegres están en toda relación, pero este par sí que tienen detrás una cantidad de tragos duros que para pasarlo, han tenido que demostrarse al 100% ese amor. De hecho, los hemos visto muy cerca de romper, y siguen todavía juntos. Lo cierto del caso es que no todo es color de rosa, y desde sus inicios las duda estaban, pero ya lo hecho está. Letizia sigue dando de qué hablar, y el Rey Felipe VI a veces no pone mano dura. ¿Quieres saber cuáles son esos baches más destacados? Quédate hasta el final porque esto está de impacto.

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Detalles que influyen… ¿Letizia y Felipe VI se aman?

Toda acción siempre va a tener una reacción, y la verdad es que Letizia se ha caracterizado por tener una personalidad muy variada cada vez que sale a luz pública. Unas veces está sonriente, en otros escenarios está seria; pero es de entender que en ocasiones no se tiene el ánimo por las nubes como para demostrar afecto. Sin embargo, este tipo de actitudes no le favorece en nada a Letizia, más bien la ha llevado vivir situaciones complicadas en su matrimonio que podrían evitarse.

Hablar de desacuerdos es ubicarnos al año 2016, durante la apertura de las Cortes. Letizia no estaba de buen humor, en medio del evento se mostraba seria y el ceño lo tenía fruncido, parecía de pocos amigos, en ningún momento sonrío, y el tiempo que duró Felipe VI emitiendo su discurso, ella estaba apagada, como si su alma estuviera en otro lugar. Era evidente, Letizia se había levantado con el pie izquierdo.

Además, ella no quería que las niñas fueran a la ceremonia porque perderían clase, y el Rey prefirió llevarlas con él. En Perú, pasó otro altercado cuando realizaron un viaje al país sudamericano hace 10 años. Todo estaba presidio por Felipe VI, y el Rey no le daba importancia a Letizia.

Aunado a esto, la Reina no sabía ni qué hacer, dónde pararse. Al caer la noche, le objetó al Rey esta falta, así como a los de protocolo por haberla dejado sin repercusión dentro del evento. Esta pareja tiene mucho para contar, y pese a sus discordias, siguen juntos, desde luego que están enamorados. Si no hace mucho fueran tirado la toalla, y adiós matrimonio.

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