El presidente de Bankia, José Ignacion Goirigolzarri, cree que las medidas económicas del Gobierno para combatir la crisis del Covid-19 deberían pasar del enfoque macro a uno micro que tenga en cuenta las características de cada sector y que se defina teniendo en cuenta a los empresarios españoles.
«Desde el punto de vista económico, las decisiones que se han tomado hasta ahora han ido en la dirección correcta. Otra cosa es que, a medida que pasa el tiempo, hay que ir cambiando el enfoque. Hasta ahora se ha tenido un enfoque muy macro de apoyo a empresas a través del ICO y ahora tenemos que pasar a un enfoque micro, porque cada sector tiene sus características y sus necesidades, y para ello hay que contar con quienes saben de esto, que son los empresarios», ha señalado Goirigolzarri en una entrevista en ‘COPE’ recogida por Europa Press.
En cuanto a la propuesta de que, al igual que Italia, el Gobierno español hubiese contado con un equipo asesor formado por economistas y empresarios, el presidente de Bankia ha apuntado que poner al frente a empresarios tiene la ventaja de que suelen contar con una visión de gestión muy desarrollada y la desventaja de que no conocen bien cómo funcionan las administraciones.
«Con independencia de quién se ponga al frente, que oiga a las personas que están en el tajo. A las personas que realmente saben, en definitiva, a los empresarios, que son los que crean empleo», ha destacado el presidente de Bankia.
De hecho, Goirigolzarri ha asegurado sentirse optimista de cara a la recuperación, porque los principales protagonistas de la salida son los empresarios y autónomos, que «han demostrado una capacidad de reacción extraordinaria» y que en la crisis de 2012 fueron «un ejemplo de generación de riqueza y empleo».
Durante la entrevista, el presidente de Bankia ha vuelto a mostrarse contrario a derogar íntegramente la reforma laboral, pues «no está justificado en ningún caso y mucho menos en un momento como este», y ha pedido que si se mejora se haga en el marco del diálogo social, pues sindicatos y empresarios «son los que saben».
LA RENTA MÍNIMA DEBE INCENTIVAR LA REINCORPORACIÓN AL MERCADO LABORAL
Preguntado por la renta mínima vital, el directivo ha apuntado que este tipo de medidas deben lograr la cohesión social, pero teniendo los incentivos adecuados para que las sociedades no caigan en «la trampa de la pobreza».
En esta línea, ha valorado que no se trate de una renta universal incondicional, sino selectiva y temporal, aunque ha reconocido que es un programa «complejo» en términos de definición e implementación.
«Si no es temporal para las personas, los objetivos serían perversos (..). Lo que debemos pretender es incentivar la incorporación de la gente al mercado de trabajo y no lo contrario, porque debemos evitar que esto dé lugar a una economía sumergida o generación de fraude», ha advertido.
Pese a la complejidad, Goirigolzarri ha afirmado que tanto la vocación de ser una medida en reevaluación constante como el propio ministro José Luis Escrivá le dan «cierta tranquilidad».
