viernes, 13 diciembre 2024

Ribera del Duero: de los cambios históricos al boom de las compras

Ribera del Duero está de moda y de cambios. Una de las Denominaciones de Origen (DO) más jóvenes de España, también es de las que más está dando que hablar en el sector del vino; y no solo por los aranceles de Trump, que también afectan, pero mucho menos cuando la idea es vender un vino de gran calidad por encima de los grandes volúmenes de otras DO. Y este es el origen de su gran cambio histórico y de las oleadas de compras de viñedos que se están produciendo.

Su historia oficial comienza el 21 de julio de 1982, cuando el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación otorgó a la Ribera del Duero la DO y aprobó su primer Reglamento. De ahí que se trate de una DO relativamente joven y no tan cerrada y tradicional como Rioja. Esta juventud permite a las grandes bodegas afianzar estrategias que busca aumentar portafolios y consolidar así un mayor peso en su red de distribución.  

albillo Merca2.es
Albillo mayor. Fuente: Ribera de Duero.

Los vinos de Ribera del Duero son fundamentalmente tintos, aunque también existen rosados. La variedad de uva más característica es la tempranillo (o “tinta del país”), la cual constituye más del 90% de la producción. 

Pero fruto de una reivindicación histórica, DO Ribera del Duero ha lanzado sus vinos blancos elaborados con uva albillo mayor. Actualmente había 30 bodegas que elaboraban vinos blancos con esta variedad de uva, pero lo hacía fuera de la DO. Ahora, otras bodegas se sumarán. “Vamos a crear grandes vinos blancos sin esperar grades volúmenes. Crearemos una nueva categoría de vino blanco de alta expresión, por lo que no vamos a competir con Rioja ni Rueda”, señala a MERCA2 Miguel Sanz, director general de Ribera del Duero. Y aprovechando la introducción del blanco han simplificado las etiquetas en cuatro: crianza, reserva y gran reserva, además de cosechero.

Desde la DO también tienen previsto exportar este vino blanco ­–aunque aun no saben qué producción tendrá–. Ahora es un momento crítico porque se desconoce qué efectos tendrá la decisión de Trump de imponer un 25% de aranceles a la importación de vinos tranquilos de menos de 14 grados. “El pasado año exportamos 1.320.000 litros, lo que supuso 14,5 millones de euros y representó el 11,8% de nuestras exportaciones. Es nuestro tercer mercado de exportación, aunque solo exportamos el 20% de la producción. No somos tan exportadores como nos gustaría ser”, señala Sanz.

Por ello, la exportación es una de las asignaturas pendientes de Ribera del Duero y más después del parón tras la mala cosecha de 2017. Ahora, desde la DO reconocen estar “invirtiendo en promoción”. De hecho, han diversificado sus mercados para no depender de uno solo y sufrir las decisiones políticas. Así, están presentes en Canadá, México, Suiza, Dinamarca y hasta Reino Unido, a pesar del Brexit.

OLEADA DE COMPRAS

Pocas DO como Ribera del Duero pueden sentirse orgullosas del interés que despierta entre sus competidores, más allá incluso de las guerras familiares de algunas de sus grandes bodegas. “DO Ribera del Duero lleva años reposicionándose a vinos de alta calidad. Es el único posicionamiento posible debido a la complejidad de hacer vinos”, explica Sanz, quien añade que este hecho hace que muchas bodegas vean a la tempranillo como buena para producir vinos de alta calidad. “Las bodegas que llegan no buscan grandes volúmenes, ni comerciales; sino un vino para posicionarse y complementar su portfolio”, apunta.

Y a las últimas compras se remite este éxito. Las bodegas de Rioja son las más interesadas en esta zona vinícola. Este año Marqués de Cáceres (Cenicero) compró Bodegas y Viñedos Robeal, situada en la localidad burgalesa de Roa, junto a sus 60 hectáreas de viñedos (ubicados en Roa, Anguix y La Horra) y su marca de vino La Capilla.

Otra de las grandes, CVNE (Compañía Vitivinícola del Norte de España) se hizo con las instalaciones y viñedos de la burgalesa Anta Banderas, que ha renombrado como Bodegas Bela. Años atrás otras bodegas riojanas también aterrizaron en la zona, como Luis Cañas con Dominio de Cair, o Roda, que invirtió en el año 2010 con bodegas La Horra.

A pesar de su juventud, los vinos de la DO Ribera del Duero están de moda y de cambios históricos; lo que ha propiciado una oleada de compras

Además de las riojanas, desde otros puntos de la geografía española también crece el interés. Así, el grupo González Byass –famoso por los vinos Tío Pepe– es el nuevo propietario de la bodega Fournier, ubicada en Berlangas de Roa (Burgos). González Byass se encuentra ya presente en 10 de las Denominaciones de Origen y regiones vitivinícolas más importantes de España (Jerez, Rioja, Cádiz, Cava, Penedés, Rueda, Somontano, Castilla, Rías Baixas y Ribera del Duero). Por último, Juvé & Camps (grupo catalán formado por la familia Juvé y un fondo holandés), compró en 2018 Torres de Anguix.

Desde la Denominación de Origen saben que seguirán produciéndose compras. “Si surge la oportunidad, la van a aprovechar”, señalan.

2019 PUEDE SER UN GRAN AÑO

Este interés por la zona también va unido a las buenas previsiones. Aunque de momento reconocen que “es pronto para dar una cifra de volumen de la vendimia de este año”, si es cierto que “podemos decir que la calidad de la uva es excelente. Así que 2019 podría ser un gran año”, señalan desde la DO de Ribera del Duero.

Además, los datos del pasado año constatan el crecimiento de esta DO. Registró la segunda mayor cosecha de su historia tras cerrar la vendimia (desde el 17 de septiembre hasta finales de octubre), con un total de 125 millones de kilos de uva recogidos. La cosecha fue calificada de excelente estado y calidad, según datos extraídos de la web de DO Ribera del Duero.

En 2018, un total de 296 bodegas estaban inscritas bajo la DO Ribera del Duero, la mayoría de ellas en Valladolid (118) y Burgos (161). Estas se reparten a lo largo de 23.200 hectáreas. De ellas, el 73,4% corresponde a territorio burgalés, un 20,4% a la zona vallisoletana y el resto se distribuye entre Soria y Segovia. La superficie no deja de crecer año tras año. Una década atrás, el número de hectáreas era inferior: 20.956.


- Publicidad -