Los factores de riesgo del cáncer son todo lo que haga que tus posibilidades de tenerlo aumenten. Según el tipo de cáncer, habrá unos factores de riesgo u otros. En algunos casos, eres tú el que elige si te expones a esos riesgos y en otros casos es como una «tómbola», que te tocan al nacer.
Que tengas muchos factores de riesgo no te asegura cien por cien que vayas a tener cáncer o, de lo contrario, no tenerlos no significa que no lo tengas. No obstante, cuanto menos fácil se lo pongas, mejor.
Algunos factores de riesgo en los que puedes intervenir son, por ejemplo, el tabaco, el sobrepeso, la obesidad o el exceso de sol. Y en los que no puedes hacer nada son la edad o los antecedentes familiares.
A continuación, te diré los factores de riesgo más comunes del cáncer de endometrio.
Obesidad
Tener obesidad es un factor de riesgo para muchas enfermedades como diabetes, colesterol y cáncer. Los ovarios femeninos son los encargados de producir más estrógenos antes de que tengas la menopausia. No obstante, el cuerpo puede también transformar los andrógenos en estrógenos y descompensar sus niveles.
Si tienes más tejidos adiposos te suben los niveles de estrógenos y aumenta tu riesgo de poder padecer cáncer de endometrio.
El riesgo de cáncer de endometrio es el doble en mujeres que sufren sobrepeso que en las que tienen un peso saludable, y el triple en las que padecen obesidad. También tienen más riesgo las personas con un peso inestable durante el transcurso de su vida.
Hormonas
Otro factor de riesgo para padecer cáncer de endometrio es el desbarajuste hormonal que se crea en el cuerpo de la mujer cuando tienen la menopausia.
El uso de estrógenos en la menopausia hace que tu riesgo de sufrir este cáncer aumente considerablemente. Los ovarios son los que se encargan de crear el estrógeno y la progesterona y estos van cambiando en cada ciclo que tienes la regla.
Cuando tienes la menopausia, tus ovarios dejan de producir dichas hormonas. Aun así, tu cuerpo continúa creando pequeñas cantidades de estrógeno del tejido adiposo y este tiene más impacto en tu cuerpo tras la menopausia que cuando aún tienes la regla.
Hay terapias hormonales para la menopausia con estrógenos que sirven para ayudar a combatir el calor y los sofocos típicos de esta etapa que aumentan los riesgos de cáncer. Sin embargo, si además del estrógeno tomas también un extra de progesterona el riesgo disminuye. De todos modos, esta terapia con hormonas es mejor que se tome durante el menor tiempo posible para evitar problemas secundarios importantes.
Al contrario de lo que puedas pensar, si tomas pastillas anticonceptivas reduces las posibilidades de padecer cáncer de endometrio. Pese a eso tiene otros muchos puntos negativos y debes sopesarlos todos. Si has estado tomando la píldora durante mucho tiempo, digamos que te cubre hasta diez años después.
Uso de DIU
Si has usado el dispositivo intrauterino para controlar la natalidad tienes menos riesgo de padecer cáncer de endometrio. No se tiene suficiente información al respecto, pero las pruebas realizadas en mujeres que lo han llevado han demostrado que el índice de sufrir este cáncer es menor que en las que no lo han llevado nunca.
Existen unos nuevos DIUS en el mercado que tienen liberación de estrógenos y así las mujeres no tienen el periodo durante el tiempo que usen dicho dispositivo.
Estos nuevos dispositivos están siendo usados de forma satisfactoria como tratamientos contra algunos precánceres o para cáncer de endometrio en su fase inicial en mujeres que quieren tener hijos.
Edad
La edad es un factor de riesgo para muchas enfermedades y en el tema del cáncer de endometrio también lo es. Las probabilidades de sufrirlo aumentan a medida que vas envejeciendo.
Este cáncer es más común en mujeres que han superado los cincuenta años. Las tres cuartas partes de las mujeres que lo padecen tienen más de 50.
El 75% de los casos tienen un diagnóstico precoz, por lo que se puede comenzar el tratamiento en las primeras etapas. Esto consiste en la extracción del útero y de los ovarios. Si está más extendido también es necesario quitar los ganglios de la pelvis y los lumboaórticos. Se realiza por laparoscopia cuando el cáncer está en estado más avanzado y también puede requerir radioterapia o quimioterapia.
Alimentación y ejercicio
Cuando sigues una alimentación que tiene mucha grasa, el riesgo de sufrir distintos cánceres y otras enfermedades aumenta de forma considerable. Además, si comes cosas con grasas y muchas calorías puedes padecer sobrepeso y obesidad que es el de mayor riesgo para el cáncer de endometrio.
Se cree que las grasas afectan a la fabricación de estrógenos y esto a su vez hace que seas más propensa al cáncer de endometrio.
Las mujeres que se pasan gran parte de su vida sentadas por llevar una vida sedentaria o por el trabajo también tienen más probabilidades de tenerlo. Es importante que recuerdes que, para tener una buena salud, el ejercicio y la alimentación son fundamentales.
Diabetes tipo 2
Los enfermos de diabetes tipo 2 tienen el doble de papeletas de tener cáncer de endometrio y a su vez de muchas otras enfermedades derivadas de la diabetes.
La diabetes es más común en personas que tienen sobrepeso u obesidad y de nuevo te enfrentas a más factores de riesgos añadidos.
El tener muchos factores de riesgo juntos hace que no se tenga claro exactamente por cuál de todos es por el que tienes más posibilidades de tener cáncer de endometrio. Las personas diabéticas deben tener muy en cuenta su peso, su alimentación, su medicación y controlar el nivel de glucosa en sangre.
Antecedentes familiares
Este es uno de los factores de riesgo en los que no puedes intervenir, la genética heredada. Es un tipo de cáncer que suele ser por herencia al igual que el cáncer de colón.
Hay genes que crean una copia anormal y no son capaces de controlar el crecimiento anómalo celular que produce el cáncer. Esto hace que el índice de sufrir cáncer de endometrio o de colón sea muy elevado.
El riesgo de una mujer normal de tener cáncer de endometrio es del 3%. Sin embargo, si tienes ciertas anomalías genéticas aumenta hasta el 70%. En algunas familias, el número de mujeres con cáncer de endometrio son muy altas, el problema es que todavía no se ha encontrado el trastorno genético que hace que esto suceda.
Haber tenido cáncer de seno o de ovario
Si has tenido cáncer de pecho o de ovarios, las probabilidades de que también sufras cáncer de endometrio suben. Los factores de riesgo como son la alimentación, los cambios hormonales y reproductivos que existen en estos cánceres también son comunes en los del endometrio.
Haber estado en tratamiento con radioterapia o quimioterapia hace que el ADN de las células se dañe y esto hace que el riesgo de otro cáncer secundario aumente.
Hay mujeres que tienen un historial con hiperplasia endometrial, que también tienen más factores de riesgo a la hora de padecer este cáncer.
Debes estar atenta a sangrados extraños y a dolores. Acude siempre a tu médico, la detección precoz es muy importante en todos los cánceres.
