Hoy en día, parece que todo el mundo apuesta por los coches electricos. Son menos contaminantes, menos ruidosos, más baratos puesto que no usan combustible… Sin embargo, también tienen sus debilidades, y antes de comprar un coche nuevo, conviene conocerlas. Según las necesidades de cada conductor puede merecer la pena o no.
La regulación del tráfico en las grandes ciudades apuesta por reducir los coches diésel y fomentar el uso de coches eléctricos o híbridos. Sin embargo, aún no estamos lo suficientemente preparados para cambiar de coche y pasarnos al eléctrico. Este tipo de vehículos tienen muchas ventajas pero también algún que otro inconveniente.
Poca autonomía de los coches eléctricos
De momento, los coches eléctricos están pensados para la ciudad y para trayectos cortos. Los modelos actuales pueden realizar unos 200 o 300 kilómetros con una sola carga. Poco práctico su quieres irte de vacaciones y hacer un viaje largo. Enseguida tienes que pensar cuándo y dónde será la siguiente recarga.
Los modelos más avanzados de coches electricos (los Tesla, y algún Volkswagen), ya están consiguiendo unos 500 kilómetros de autonomía sin recargar. Pero esos vehículos aún son muy caros. Este es uno de las grandes debilidades de este tipo de coches y tendrán que avanzar en ello para hacerse más comerciales.
