A la vinagreta, guisado, en brocheta o en salpicón. Hay muchas maneras de preparar el pulpo, pero sin ninguna duda la más rica, la que más seguidores tiene es la receta de pulpo a la gallega. Con cachelos o sin cachelos, con más o menos picante, pero pocas personas hay en el mundo que no se emocionen ante una tapita de pulpo a la gallega. Te contamos cómo puedes preparar esta deliciosa receta.
El origen

Carballiño, una pequeña localidad de Orense es para muchos el lugar donde mejor pulpo se come de toda España. No en vano, es la localidad donde nace la famosa receta de pulpo a la gallega. Allí, hace más de cuatrocientos años, los monjes del Monasterio de Oseira cobraban su diezmo en pulpo. Posteriormente, en la feria del ganado de Carballiño, a la que pertenece la aldea de Oseira, los monjes le daban a las mujeres los pulpos y estas, lo ponían a cocer en ollas de cobre. Por eso, esta feria sigue siendo un lugar de culto para los amantes del pulpo. Las pulpeiras siguen haciendo allí la misma receta de siempre, a pesar de los años.
Dónde degustarlo

El pulpo a la gallega se ha popularizado mucho. De hecho, a partir de los años 80 y 90 su éxito es tal que se tiene que recurrir a pulpos procedentes de Marruecos, Alaska u otros mares que nada tienen que ver con las costas gallegas. Además, en algunos lugares varían tanto la receta original que en poco o nada se parece a la auténtica receta de pulpo a la gallega. Por eso hemos pensado que mejor, te ponemos la receta y lo intentas. Verás que no es tan difícil como te imaginabas.
¿Cómo se hace el pulpo a la gallega?

Si no te lo han limpiado en la pescadería – lo que es poco común – limpia el pulpo antes de prepararlo. Lo normal es que esté limpio y que haya sido previamente congelado, así evitamos posibles enfermedades. Lo descongelamos y ponemos agua a hervir. Introducimos el pulpo unos 20 minutos aproximadamente – desde que el agua vuelve a hervir – y después, ya con el fuego apagado, lo dejamos otros 20 minutos en la olla reposando. Esto es importante, y veremos como el pulpo, va cogiendo consistencia con el reposado. Al sacarlo, lo cortamos y lo servimos con sal, aceite de oliva virgen y pimentón al gusto. Ya tendríamos nuestro pulpo a la gallega.
Las patatas o cachelos

Aunque hay gente que prefiere el pulpo sin más acompañamiento, la auténtica receta de pulpo a la gallega lleva cachelos como guarnición. Es decir, patatas cocidas. La clave para que estén sabrosas es cocerlas sin piel en abundante agua con sal y procurar que sean todas del mismo tamaño. De otra forma, las patatas grandes estarán crudas y las pequeñas muy cocidas.
Trucos

Como ves la receta de pulpo a la gallega no tiene mucho misterio. Lo ideal es tener un buen producto y estar un poco pendiente de la cocción para que no nos quede duro, pero tampoco se deshaga en la boca porque nos hemos pasado de tiempo. Las pulpeiras gallegas suelen «asustar» al pulpo antes de cocerlo, es decir, lo golpean y lo meten dos o tres veces en el agua antes de depositarlo en la olla. Pero no es necesario que tu lo hagas ya que tu pulpo ha sido congelado previamente. Si quieres parecer un auténtico pulpeiro gallego, sirve tu pulpo en un plato de madera.