Las normas de tráfico están en constante evolución para adaptarse a las necesidades de todos los usuarios de la vía. La Dirección General de Tráfico (DGT) ha anunciado recientemente un cambio inesperado en la normativa que afecta directamente a los ciclistas y a los conductores en las ciudades. Estas modificaciones buscan mejorar la convivencia en la vía, pero han generado un fuerte debate entre los distintos colectivos implicados.
Con la creciente presencia de bicicletas en el tráfico urbano, la DGT ha decidido implementar medidas que cambian la forma en la que ciclistas y automovilistas deben interactuar en la ciudad. Entre las reformas más polémicas se encuentra la posibilidad de que las bicicletas circulen en sentido contrario en determinadas calles, una decisión que no ha pasado desapercibida.
3Un nuevo criterio de distancia de seguridad entre bicicletas y coches

Otro de los cambios que ha introducido la DGT en esta nueva normativa tiene que ver con la distancia mínima de seguridad entre bicicletas y coches. A partir de ahora, los conductores de vehículos a motor deberán mantener una distancia de al menos cinco metros al adelantar a un ciclista en zonas urbanas.
Este ajuste busca reducir los accidentes y minimizar los riesgos de rozamientos entre automóviles y bicicletas, una de las causas más frecuentes de siniestros en las ciudades. Aunque la medida ha sido bien recibida por los colectivos ciclistas, algunos conductores consideran que puede dificultar el tráfico en calles estrechas y congestionadas.