Doña Carla y su madre estarán en peligro en el próximo episodio de ‘La Moderna’

Llegamos al último capítulo de la semana con ‘La Moderna’, una serie que nos deja con la boca abierta gracias a la calidad de sus guiones y al cuidado de sus detalles. En apenas unos meses se ha convertido en uno de los títulos más icónicos de La 1, y no es para menos, ya que reúne a más de un millón de espectadores cada tarde.

Los últimos episodios han estado marcados por la investigación de Matilde e Íñigo, así como por los descubrimientos de Antonia y Pietro sobre don Cecilio. Resumimos lo ocurrido esta semana y ofrecemos un pequeño avance de lo que podrás ver este viernes en ‘La Moderna’.

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‘La Moderna’: Aguirre amenaza a doña Carla

La segunda temporada de ‘La Moderna’ no pudo empezar de forma más dramática. Por orden de doña Carla, Aguirre mandó un sicario a la boda de Matilde e Íñigo con la intención de asesinar a la novia, pero Íñigo se abalanzó sobre él desviando las balas. Una de ellas alcanzó a Rosario, la madre de Matilde, acabando con su vida.

Una segunda bala dejó gravemente herido a Íñigo, que tuvo que ser trasladado al hospital y operado. Finalmente logró salvar su vida, pero quedó con unas pérdidas de memoria muy preocupantes. Poco a poco fue recordando lo que ocurrió en su fallida boda y llegó a la conclusión de que Aguirre estaba detrás de todo.

Así se lo hizo saber a Matilde y a Carla, pues no sospecha la implicación de esta última en el asunto. Por ello, la pareja ha iniciado una investigación sin saber que están siendo vigilados. Carla está preocupada por ello, pues si llegan a delatarla, todo habrá acabado para ella.

Pero Carla tiene otros asuntos en la cabeza. Aún no ha cumplido su parte del trato con Aguirre, y el empresario la está amenazando para ello. Una preocupación que han advertido tanto Bárbara, su madre, como su pareja, Fabio, a quien Carla se ha comprometido a ayudar a hacer contactos en la ciudad con el fin de relanzar su carrera política.

Por otro lado, en anteriores episodios de ‘La Moderna’ tuvimos que despedirnos de Luisa, que se marchó a Italia gracias a la intervención de una pintora llamada Maruja Mallo. La artista le dijo que podría conseguirle una plaza en la Real Academia Española de Roma, así que la mujer puso rumbo a este país tras despedirse de todos.

También hemos visto a Laurita cambiar sus planes por completo al rechazar una buena oferta de trabajo en Sevilla para quedarse en Madrid con su hermana, Inés, que lleva tiempo siendo víctima del acoso de Bernabé. Por ello don Fermín decidió darle un empleo como comercial creativa en el salón de té, de manera que pudiera estar más cerca de su hermana.

Además, está pudiendo desarrollar su carrera en la capital. Tras una exitosa campaña en el cine que sirvió para promocionar el salón de té como nunca antes, don Fermín le pidió a Laurita que consiguiera un reportaje en una prestigiosa revista. Por ello habló con Galán para convencerle que escribiera dicho reportaje, aunque le impuso como condición invitarle al Madrid Cabaret. En el último episodio vimos a Laura muy nerviosa, esperando una respuesta definitiva sobre el reportaje.

Al ascender a Laura, quedó vacante un puesto como dependiente en La Moderna. Este ha sido ocupado por una joven llamada Lázara, que no ha podido empezar con peor pie en el salón de té. Desde el principio se ha dedicado a criticar a sus compañeras, especialmente a Trini y Esperanza. Su intención es quedarse con el puesto de encargada de Teresa.

Elías ha ignorado las protestas de sus compañeras, ya que las considera injustificadas. A partir de ahora Matilde también tendrá que aguantar los aires de grandeza de la nueva empleada, ya que tras su fallida boda, ha decidido reincorporarse al trabajo.

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