LaLiga experimenta un crecimiento de un 21,9% de asistencia a los estadios en los últimos 10 años

La capacidad de LaLiga, presidida por Javier Tebas, para atraer a los aficionados queda avalada por los datos, ya que, según las cifras que aporta la entidad, la asistencia total a los estadios en las últimas ocho temporadas experimentó un crecimiento de un 21,9%.

Una vez superadas las restricciones de la pandemia, la ratio de ocupación en la actual 22/23 confirma su tendencia ascendente y hasta la jornada 20 de LaLiga Santander y la 26 de LaLiga Smartbank se sitúa en el 16,7%, con un crecimiento también en cifras absolutas del 2,1%.

Todo ello a pesar de que, tanto la temporada pasada y la actual, grandes campos de LaLiga como el Santiago Bernabéu del Real Madrid, el Abanca Balaídos del RC Celta, el estadio de la Cerámica del Villareal CF o el estadio de Son Moix del RCD Mallorca están siendo o han sido reformados, lo que impacta en el número total de aficionados que pueden acudir a presenciar los encuentros de esos equipos.

Además, el Camp Nou, el estadio con mayor capacidad de la competición, próximamente se añadirá a esa lista de estadios bajo reforma, lo que trasladará el centro de operaciones del FC Barcelona al Lluis Companys. Esto también afectará al cómputo global de fans que pueden acudir a presenciar los partidos del equipo culé y, por tanto, de LaLiga.

Esta ola de reformas en los estadios de LaLiga, que modernizará las infraestructuras deportivas de los clubes, significará que los aficionados podrán acceder a una experiencia in-situ mejorada dentro de ellos, ya que con cada una de ellas se incorporan las últimas tendencias en tecnología, así como también nuevas formas de vivir y ver el fútbol, además de incrementar la adaptación de los accesos de los estadios para personas con discapacidad y una mayor comodidad para el conjunto de los fans. De hecho, de acuerdo con fuentes de LaLiga “estas cifras confirman que LaLiga y el fútbol tal y como lo conocemos no es un producto caduco, sino todo lo contrario, está más vivo que nunca”.

Esta actualización de las instalaciones también podría aumentar las posibilidades de la candidatura ibérica, formada por España, Portugal y Ucrania para acoger el Mundial de 2030, una decisión que la FIFA tomará en septiembre de 2024 y que puede suponer la segunda vez que España sea la encargada de la organización de la competición de selecciones más importante del mundo.