Josu Imaz, consejero delegado de Repsol, entregó muy buenas noticias al mercado referente a los resultados financieros de los nueve primeros meses del año. Entre ellos, su consejero delegado destaca que el resultado neto ascendió a 1.939 millones de euros lo cual, comparado al mismo periodo de 2019 que fue 1.466 millones de euros significó un incremento del 32,26%. Esta comparación con 2019 puntualizó, se hace teniendo en cuenta que el año 2020 fue nefasto tanto para Repsol como para la mayoría de las empresas a nivel mundial.
El resultado neto ajustado alcanzó 1.582 millones de euros, lo cual le permite mejorar el dividendo en efectivo hasta en un 5% alcanzando los 0,63 euros por acción. Adicional a ello, la compañía registra una disminución de su deuda neta de -642 millones de euros lo que representa una disminución del 9%.
Específicamente para el tercer trimestre, Repsol registró un resultado neto ajustado de 623 millones de euros lo que equivale a un incremento del 27,66% frente al trimestre anterior. El ebitda se sitúa en 1.551 millones duplicando así los resultados del tercer trimestre de 2020.
En términos generales, son resultados muy positivos para la compañía los cuales deberían verse reflejados en el comportamiento de su acción a largo plazo.
Cabe destacar que técnicamente la acción de Repsol viene trabajando desde el año 2007 un canal bajista para gráfico de marco mensual que se encuentra cercano a la resistencia macro más importante de mediados de 2012.
En gráfico de marco diario encontramos una tendencia interna alcista que se construye desde finales de octubre de 2020 en la cual, el precio se encuentra retesteando en este momento y con la probabilidad de visitar el nivel superior del canal bajista macro, nivel que de seguro visitará si realiza la ruptura de la resistencia mensual en inmediaciones de los 12 euros por acción. Operación que en el corto plazo podría generar compras con un objetivo del 23% de rentabilidad hasta los 12 euros.
Por otro lado, si el precio visita los 12 euros y respeta el nivel superior del canal bajista, nos ubicaríamos nuevamente con la tendencia macro a la baja. Inclusive, si el precio decide realizar el quiebre de la tendencia alcista interna, así como de la media móvil exponencial de 250 periodos, nos indicaría muy probablemente, un movimiento más profundo a la baja en busca del nivel inferior del canal bajista en inmediaciones de los 5,3 euros por acción lo que representa más de un 50% de rentabilidad y/o desvalorización del precio de la acción de Repsol.