La comunicación es una poderosa herramienta que tiene la capacidad de hacer que un pequeño negocio crezca. Por el contrario, si no la utilizamos bien, puede ser la “culpable” de poner los clavos en el ataúd de nuestro proyecto. Es muy importante a nivel interno y también a nivel externo, y hoy nos vamos a centrar en la que se desarrolla entre la empresa y los clientes.
Las habilidades comunicativas están entre las más demandadas por las empresas cuando buscan personas que ocupen puestos directivos. También son habilidades básicas que deben tener quienes se lanzan a la aventura de emprender. Como siempre hay margen para la mejora, aquí van algunos consejos para conseguir una interacción marca-cliente todavía más efectiva.
5El lenguaje positivo es de gran ayuda
La forma en que nos expresamos influye en cómo percibe la otra parte la comunicación. Por eso, incluso en las situaciones más complicadas hay que mantener siempre una actitud dialogante y positiva, usando también un lenguaje positivo que rebaje la tensión y ayude a generar un clima de confianza.
La idea es transmitir de una forma asertiva las ideas, las necesidades y hasta los sentimientos. Saber encontrar las palabras adecuadas puede darle un giro radical a una situación y conseguir que se resuelva de la mejor forma posible. De hecho, trabajar el lenguaje positivo también da muy buenos resultados en la comunicación a nivel personal, incluso para el diálogo interno.
