El fin de la Superliga golpea a Florentino Pérez donde más le duele

Las cuentas eran muy claras: 233 millones de euros para cada club que formara parte de la Superliga. Eso para empezar. Dinero que iría para infraestructuras y para compensar el impacto de la pandemia que, entre otras cosas, ha dejado los estadios vacíos de público. Un ingreso que ha hecho resentir las cuentas de, entre otros, el Real Madrid presidido por Florentino Pérez.

El también a la sazón presidente de la Superliga se las prometía felices porque, este dinero, le ayudaría a pagar la reforma del estadio Santiago Bernabéu. En su mesa tiene un crédito de 575 millones, que deberá pagar en 30 años a partir de 2023, una vez concluya la transformación. La guinda es que, quien ganara la competición, se llevaría otros 250 millones de euros.

Pero más allá de la reforma, hay otro dato que obsesiona a Florentino Pérez. Y ese no es otro que el de la deuda. Tanto es así que no duda en admitirlo en los consejos de administración de ACS cuando así procede.

La deuda bruta actual del Real Madrid es de 901 millones de euros. La neta se sitúa en los 355 millones de euros. De esta última, 114 millones corresponden a la citada reforma del Santiago Bernabéu. La deuda a corto plazo es de 203 millones de euros. Otro dato interesante hace referencia al fondo de maniobra.

Se trata del activo corriente de una empresa financiada con deuda a largo plazo (pasivo no corriente). El mismo se calcula mediante la diferencia entre el activo corriente y la deuda a corto plazo. Su control es importante para garantizar la liquidez y la solvencia de la empresa a corto plazo. En el Real Madrid es negativo: -112 millones de euros.

FLORENTINO PÉREZ ¿REPITE?

Cuando Florentino Pérez aterrizó por vez primera en el Real Madrid, allá en el año 2000, la deuda que arrastraba el Real Madrid era de 46.200 millones de pesetas (unos 277 millones de euros). Y fue uno de los puntos en los que hizo más hincapié.

De hecho, consiguió algo que otros mandatarios del club merengue venían intentando (incluido aquel que en la actualidad da nombre al estadio), pero que fracasaron en el intento: vender los terrenos de la ciudad deportiva situados al lado del hospital de La Paz.

Florentino Pérez alcanzó el ‘milagro’, y logró la venta por unos 60.000 millones de pesetas (unos 360 millones de euros). Gracias a este movimiento, la deuda a corto plazo se quedó a cero.

El presidente del Real Madrid acaba de ser elegido como presidente de la Casa Blanca de Concha Espina por otros cuatro años. Y la elevada deuda del club le preocupa. La pandemia no ha hecho sino acrecentar la deuda, y tratará de enjugarla a pesar del revés del rechazo a la Superliga. A diferencia de lo sucedido en el pasado, ahora no cuenta con terrenos que vender. Y busca alternativas.

No es algo que le preocupe sólo en el Real Madrid. Florentino Pérez, al frente del grupo ACS, también ha movido piezas para intentar enjugar la deuda. Durante el año pasado, la misma se incrementó. De ahí que fuese una de las razones por las que acabó poniendo a la venta una de las joyas de la corona, su división industrial.