Los gigantes de la distribución centran la batalla por reinar en la mesa durante Semana Santa

La Semana Santa, además de ser tiempo de pasión y de vacaciones, se define por ser uno de los momentos gastronómicos más importantes del calendario. No en vano se trata de un periodo en el que determinados platos y productos toman un gran protagonismo. Tanto a nivel nacional como regional. Los supermercados, de Aldi a Carrefour, pasando por DIA, Mercadona o Lidl, lo saben. Y las alternativas que disponen para los consumidores aumentan como la espuma.

Así, por ejemplo, Aldi dispone de una gran gama de bacalao. Este producto es uno de los favoritos de los clientes para elaborar diferentes platos salados. Hay quien lo introduce en el potaje, o lo utiliza para hacer buñuelos, o para rellenar pimientos, por ejemplo. El bacalao de cuaresma, la tortilla de bacalao, o el bacalao al pil-pil o con tomate son otras opciones.

La cadena alemana dispone de muchas opciones de bacalao: porciones de bacalao, hamburguesas de bacalao, bacalao desmigado desalado, o lomos de bacalao. DIA también dispone de bacao fresco y salado, tanto en las secciones, como en libre servicio. Lidl, por su parte, apuesta por el bacalao Skrei.

CARREFOUR APUESTA POR LOS DULCES

Si Aldi ha puesto el foco en el bacalao, Carrefour lo ha hecho por los dulces. La tradición pastelera en Semana Santa es ingente. Incluso cada comunidad autónoma tiene sus propios postres. Pero hay uno que destaca sobre el resto: las torriijas.

Carrefour tiene previsto comercializar 290.000 panes de torrijas esta Semana Santa. Se trata de un 10% más que el año pasado. Es Ruipán el proveedor que le facilita la materia prima desde el año 2004. Además, y para aquellos que no quieren pringarse los dedos haciéndolas, la cadena francesa las vende ya cocinadas. En este caso, es otro productor madrileño quien se las ofrece: Vircar Panificadora.

Más allá de las torrijas, este año Carrefour ha incorporado esta Semana Santa a su surtido de dulces aquellos procedentes de 11 conventos de nueve provincias. Pestiños, nevaditos, rosquillas madalenas, tejas o bizcochos tradicionales al alcance de todos.

En Cataluña, por ejemplo, es típico un dulce: la Mona de Pascua. O los roscos del Ampurdán, y los buñuelos de vientos. Aldi ofrece huevos de chocolate rellenos, conejo de chocolate, crema pastelera, o levadura para panadería para aquellos manitas que quieren dar rienda suelta a su pasión pastelera.

MERCADONA SE SUBE AL CARRO

Mercadona también se ha subido al carro de lo dulce. Así, en sus lineales se pueden encontrar los huevos de Pascua, tanto en bolsa como en huevera. Y se pueden adquirir en tamaño mini o grande, o con diferentes temas, como La liga de la justicia, o Bebés llorones. Tampoco faltan figuras con forma de conejo, polluelo o balón de fútbol.

Respecto a la posibilidad de encontrar algunos de los platos típicos de la época en su sección Listo para Comer, Mercadona no tiene un surtido específico para Semana Santa. La sección sólo elabora dicho surtido específico en Navidad. En estas fechas, la cadena presidida por Juan Roig se adapta a los hábitos de consumo locales. Ello explica, por ejemplo, que tengan pestiños en tiendas de Andalucía, Rosca de Pascua en Galicia, Robiols en Mallorca, Crespells en Menorca, o Monas en Valencia.

DIA también incluye en su oferta en Semana Santa, dos tipos de pan diferentes para hacer torrijas (en barra y en rebanadas), huevos y figuras de chocolate. Además, en algunas zonas, y dada la especificidad de determinadas regiones, han incluido productos típicos de las mismas. Así, en Levante, ponen a disposición de sus clientes monas de Pascua, coca y pan quemado. En Cataluña, por poner otro caso, su apuesta son las tradicionales monas de Pascua y, en Andalucía, los típicos pestiños.

Lidl, por su parte, no se queda sólo en el conejo o huevo de Pascua. Su oferta tiene un toque más internacional, apostando por productos como los fusilloni, el hojaldre de salmón, los mini bavarois, o el tiramisú.

Aldi, Carrefour, Mercadona, DIA, Lidl… todos saben que Semana Santa es un momento único para compartir delicias gastronómicas. Y no dudan en poner toda la carne en el asador para que el final de la campaña sea de dulce para sus cuentas.