Millones de personas en todo el mundo verán la proclamación de Joe Biden, el próximo 20 de enero, como nuevo presidente de Estados Unidos. A su manera, también lo harán las seis grandes constructoras españolas, con claros intereses al otro lado del Atlántico. “Si finalmente Joe Biden aprueba el paquete de gasto en infraestructura, como así espera el mercado, tanto ACS, Acciona como Ferrovial podrían verse beneficiadas de ello”, señala Sergio Ávila, analista de IG. Lo mismo sucedería con Sacyr, FCC y OHL.
Y todo porque el nuevo presidente de Estados Unidos tiene previsto invertir 1,3 billones de dólares en diez años. De esa cantidad, 300.000 millones de dólares estarán destinados a arreglar carreteras y puentes. Por ejemplo, Ferrovial lleva a cabo el mantenimiento de infraestructuras de transporte en diferentes estados como Alaska, California, Colorado, Florida, Georgia, Michigan y Texas. Además, tiene infraestructuras bajo gestión por un valor que supera los 10.000 millones de dólares.
En el caso de ACS, en el tercer trimestre de 2020 obtuvo cinco nuevos proyectos por valor de 2.400 millones de euros en EEUU. Uno de esos proyectos fue la construcción de una nueva terminal en el Aeropuerto de San Diego (California). Y es que, además de las carreteras y puentes, la nueva administración dedicará sus esfuerzos a otros tipos de infraestructuras como escuelas, edificios institucionales, puertos, aeropuertos o ferrocarril.
De esta manera, tanto ACS como Ferrovial, y el resto de constructoras, recuperarían parte del terreno perdido durante 2020. De enero a septiembre, su beneficio neto fue de solo 162 millones de euros, es decir, un 87% menos que en el mismo periodo de 2019. Dicho de otra manera, en el camino se han quedado más de 1.000 millones de euros. También conviene recordar que, en conjunto, tuvieron una caída en Bolsa de 5.894,2 millones de euros. Cantidad que hubiese llegado a 7.150,4 millones de no haber sido por Acciona. Fue la única cuya capitalización creció en 1.256,2 millones de euros.
LA IMPORTANCIA DE EEUU PARA ACS
Casi cuatro de cada diez euros de ACS, el grupo presidido por Florentino Pérez, proceden de EEUU. Que ACS y Ferrovial, junto al resto de constructoras españolas, no hayan sacado más partido a Estados Unidos durante el mandato de Donald Trump se debe a la falta de acuerdo entre demócratas y republicanos a la hora de definir el importe y el alcance de la inversión. Habiendo recuperado los demócratas la mayoría tanto en el Congreso como en el Senado, esa traba queda a un lado.
Quien también se verá beneficiada junto a ACS y Ferrovial será Acciona. Joe Biden quiere que su mandato se defina por el apoyo a las energías renovables. Y ahí Acciona, junto a Iberdrola, parten con una buena posición en la parrilla de salida dado su buen posicionamiento.
La ‘ola azul’ demócrata quiere hacer de la lucha contra el cambio climático su santo y seña. Volver al Acuerdo de París está entre sus prioridades. De ahí que invertir en soluciones contra el cambio climático, la modernización de toda la infraestructura eléctrica, y el impulso a las nuevas energías para descarbonizar EEUU sean prioritarias para Joe Biden.
Pese al impacto de la pandemia, las previsiones económicas de EEUU han mejorado. Así, la Reserva Federal ha elevado el crecimiento para el PIB del 4% al 4,2% en 2021. Y del 3% al 3,2% en 2022. La agenda inversora en medio ambiente y construcción ayudarán a ello. Tanto ACS, como Ferrovial, y el resto de constructoras, pueden sacar partido.
