La cifra de negocio de Primark entre marzo y junio, tercer trimestre fiscal de su matriz, el grupo británico AB Foods, alcanzó los 582 millones de libras esterlinas (645 millones de euros), lo que representa una caída del 75% a tipo de cambio constante en comparación con el mismo periodo del ejercicio anterior debido al impacto de los cierres de tiendas por las medidas de contención de la pandemia de Covid-19.
De este modo, en los nueve primeros meses de su ejercicio fiscal, los ingresos de la firma textil se han reducido un 27%, hasta 4.292 millones de libras esterlinas (4.755 millones de euros).
La multinacional indicó que el cierre de todos sus establecimientos en marzo resultó en la pérdida de ventas mensuales por importe de 650 millones de libras (720 millones de euros). La salida neta de efectivo para Primark entre el 1 de marzo y el 23 de mayo fue de alrededor de 800 millones de libras (887 millones de euros) incluyendo principalmente pagos a proveedores y gastos operativos.
En este sentido, desde la reapertura iniciada el pasado 4 de mayo, las ventas comparables acumuladas por Primark en las siete semanas hasta el 20 de junio sumaron 322 millones de libras (357 millones de euros), lo que representa un descenso del 12% respecto del mismo periodo del ejercicio precedente.
Por su parte, la facturación de la cadena en la semana del 20 de junio, con el 90% de la superficie de venta abierta, alcanzó los 133 millones de libras (147 millones de euros) con la evolución comercial de Inglaterra e Irlanda por delante de la registrada en el mismo tiempo del ejercicio anterior.
«Casi todas las tiendas Primark ahora están operando nuevamente y estimamos que el beneficio operativo ajustado para Primark, excluyendo los cargos excepcionales, estará en el rango de entre 300 y 350 millones de libras (333 y 388 millones de euros) en el ejercicio, frente a los 913 millones de libras (1.012 millones de euros) reportados el año pasado», indicó la compañía.
«El comercio en nuestras tiendas reabiertas ha sido, en conjunto, alentador», ha destacado la multinacional, destacando la fuerte demanda de ropa para los niños, el ocio y la noche,así como en el caso de productos de verano como pantalones cortos y camisetas, mientras que ha sido «sorprendentemente débil para la ropa masculina formal y los accesorios relacionados con los viajes».
«La mayoría de nuestras tiendas regionales están funcionando bien, especialmente en los parques minoristas. Nuestras tiendas en el centro de las grandes ciudades están sufriendo la actual ausencia de turismo y un tráfico mucho menor», ha añadido.
Por otro lado, la compañía ha informado del retraso en su programa de aperturas previsto para la segunda mitad de su ejercicio como consecuencia de las restricciones implementadas, aunque en el tercer trimestre llevó a cabo la apertura de cinco establecimientos, incluyendo una nueva tienda en la Plaza de Cataluña, en Barcelona.
En lo que queda de ejercicio, la cadena prevé la apertura de otros cinco establecimientos, además de la ampliación de las tiendas en Málaga y en el centro comercial Ubbo de Lisboa, lo que elevará a 1,5 millones de metros cuadrados la superficie de venta al por menor de la compañía, que advirtió de que las fechas de apertura de las nuevas tiendas en los EEUU dependen del levantamiento de las restricciones locales para el comercio minorista relacionadas con la Covid-19.