Los partidos políticos dieron este martes en el Congreso su apoyo a que se siga usando el dinero en efectivo en España con independencia de la crisis sanitaria del Covid-19 y defendieron que cualquier decisión sobre la sustitución de este medio de pago se haga de forma consensuada y en el seno de la Unión Europea.
Las fuerzas políticas se posicionaron sobre esta cuestión al debatirse en la Comisión de Hacienda una proposición no de ley del PSOE referida a “la orientación del sistema tributario ante la crisis provocada por el Covid-19”.
La redacción inicial de esta proposición de los socialistas contenía un punto, el 11, que planteaba la “eliminación gradual del pago en efectivo, con el horizonte de su desaparición definitiva”. Esta idea abrió un debate en la última semana, ya que sectores económicos y sociales alertaron de que prescindir de golpe de monedas y billetes causaría un daño económico y perjudicaría a determinados colectivos de la sociedad, como mayores y jóvenes.
La diputada del PSOE que defendió esta proposición, Patricia Blanquer, informó de que su partido había sustituido el punto referido al dinero en efectivo por otro que clarificaba su posición al respecto. Así, en esta enmienda, los socialistas hablan de que debe buscarse la “reducción de los límites del pago en objetivo con un objetivo a largo plazo, de una forma gradual, consensuada y coordinada en el ámbito de la Unión Europea”.
“CON MUCHA CABEZA”
Además, Blanquer explicó que la intención de su partido con esta proposición no de ley era que el Estado cuente con suficientes ingresos fiscales para afrontar el gasto público que será necesario como consecuencia de la pandemia del Covid-19. Añadió que la intención del partido del Gobierno con esta iniciativa era aumentar la “concienciación tributaria” de la sociedad española y no tanto referirse a cuestiones concretas, como la evolución del uso de dinero en efectivo.
La rectificación del PSOE sobre el dinero en efectivo fue saludada por los representantes de Ciudadanos, Junts per Catalunya, Vox y PP, que aseguraron que prescindir de monedas y billetes es una medida que debe debatirse antes y tener en cuenta sus repercusiones.
Así, Mari Carmen Martínez, de Ciudadanos, defendió que la progresiva retirada del dinero en efectivo debe hacerse “con mucha cabeza”, ya que en las zonas rurales de España “no están preparados” para hacer pagos sólo a través de Internet o con tarjeta.
Asimismo, la diputada del PP Carolina España sostuvo que “el pago en efectivo no puede desaparecer” y dio la bienvenida al PSOE “a la sensatez”, al tiempo que sostuvo que la formación socialista de nuevo “sólo acierta cuando rectifica”.
“RECHAZO INTENSO”
Por su parte, Rodrigo Jiménez, de Vox, explicó que su formación ha presentado en el Congreso una iniciativa propia para mantener el dinero en efectivo y defendió que un “cambio radical” que implique la desaparición automática de monedas y billetes es “imposible” y provocaría un “rechazo intenso” y “protestas” de los ciudadanos.
Además, Idoia Sagastizábal, del PNV, dijo que su fuerza política celebraba que el PSOE hubiera presentado una enmienda a su propio texto sobre el dinero en efectivo, puesto que la supresión del mismo debe hacerse “de forma consensuada” y no puede hablarse de una eliminación de golpe.
En la misma línea se pronunció Ferran Bel, de Junts, quien dijo que su fuerza política tenía “dudas razonables” sobre el planteamiento del PSOE sobre el fin del dinero en efectivo, por lo que se felicitaba de que el partido del Gobierno hubiera matizado su posición.