De campechano a jeta: Motivos por los que los españoles se hartaron de Juan Carlos I

La palabra ‘campechano’ ha sido la que más ha  definido a Juan Carlos I durante gran parte de su reinado. Prácticamente se ha apropiado del término, si buscamos ‘campechano’ en el diccionario, aparecerá la foto del rey emérito. Ha protagonizado momentos graciosos en los que se ha mostrado cercano al pueblo, sin la distancia y la seriedad que exigen el protocolo, y esto se ha ganado la simpatía de los españoles. La cuestión es que mientras, de puertas para afuera, bromeaba sobre su fractura de cadera, aceptaba las gafas de ‘Caiga quien caiga’ de las manos de Gran Wyoming o lloraba como una magdalena en las olimpiadas del 92, de puertas adentro se dedicaba a hacer tejemanejes corruptos. Y al final el pueblo se ha hartado. ¿Cómo se ha llegado a este punto? Estos son algunos de los hechos que han cabreado a los españoles. 

BOTSWANA 

Su declive comenzó con el tema de Botswana, que corrió como la pólvora gracias a que en aquella época los medios digitales comenzaban a despuntar, al igual que las redes sociales, era el principio la información viral. El asunto se destapó a raíz de una fractura de cadera que sufrió durante una cacería en el país africano. Se trataba de un viaje de lujo de 45.000 euros, que Juan Carlos decidió realizar en plena crisis económica. Fue muy criticado y el monarca tuvo que disculparse públicamente. El incidente también destapó la ‘amistad’ con la aristócrata Corinna zu Zayn-Wittgenstein.

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Noemi A.
Noemi A.
Soy una apasionada de internet, las nuevas tecnologías y las redes sociales, adicta a la información y a aprender y descubrir algo nuevo cada día.