El director de riesgos y consejero ejecutivo de Banco Sabadell, David Vegara Figueras, invirtió 33.600 euros en acciones de la entidad durante la sesión de descalabro bursátil que sufrió el pasado viernes tras la presentación de los resultados correspondientes al ejercicio 2019.
El que fuera secretario de Estado de Economía en 2004 y que desde el pasado mes de diciembre forma parte también del órgano de administración de TSB, la filial británica de Banco Sabadell, ha querido dar una muestra de confianza con la compra de 40.000 acciones a un precio de 0,84 euros a fecha de 31 de enero.
Los títulos de la entidad se hundieron ese día un 13,94%, la mayor caída de su historia desde el Brexit. Aunque el banco logró más que duplicar las ganancias de un año antes, situándolas en 768 millones de euros, algunos aspectos como las pérdidas adicionales y no esperadas por la venta de carteras de activos tóxicos o la rebaja en los márgenes de la cuenta de resultados no contentaron a los inversores.
Tras la rendición de cuentas, los analistas actualizaron su apuesta por los títulos del banco. Tanto el número de recomendaciones de compra como el precio al que ven sus acciones en los próximos doce meses se ha reducido, si bien estas rebajas, unidas a la corrección sufrida, colocan su potencial de revalorización en el 33%.
El 90% –de un total de 29 analistas– recomienda comprar o mantener acciones de la entidad, seis puntos porcentuales menos que en el trimestre anterior; mientras que el 10% restante apuesta por la venta.
Además, el precio objetivo medio se ha rebajado de los 1,16 euros en el que lo establecía el consenso el pasado 28 de octubre, hasta los 1,08 euros actuales. Sin embargo, a precios de mercado –0,835 euros de ayer– el potencial asciende al 29%, que se amplía hasta el 33% teniendo en cuenta el nivel en el que cerraron las acciones el pasado viernes.
