En España tenemos una cultura de ‘sobremedicación’ o de confiar, a veces por la lentitud o dificultad en la atención primaria o especializada, en lo que nos dicen y proporcionan en las farmacias. A veces nos salvan de un apuro pero otras puede ser contraproducente. Y es que según algunos expertos, como veremos, no es ya que la farmacia sea la panacea para todo -nunca mejor dicho- sino que comercializan medicamentos de los que no nos podemos fiar, al menos al 100%. Vamos a ver cuáles son y así evitar que el remedio sea peor que la enfermedad.
LO QUE DICEN LOS EXPERTOS

Expertos como Esther Samper, médica y divulgadora, experta en medicamentos, fármacos y salud. La especialista ha señalado que las estanterías de las farmacias no están repletas de productos de los que 100% podamos fiarnos, como recoge en su libro ‘El lado oculto de la farmacia’. Sin embargo, quiere dejar claro que no es ni mucho menos una ataque sobre lo que ofrecen las farmacias o el colectivo farmacéutico, sino una defensa de los derechos y precauciones del paciente. Debe darse cuenta de que no todos los productos pueden ser beneficiosos para su salud, por el mero hecho de comprarlos en una farmacia, y menos aún si se basan en meras consultas o suposiciones sin una opinión médica y revisión fiable.
Europa es la zona del mundo más estricta en cuanto a control de medicamentos, tras estrictos ensayos clínicos y cribas antes de su comercialización. Pero no impide que haya casos de dudosa efectividad. Vamos a ver cuáles son y que la propia autora divide por bloques…
MEDICAMENTOS CONTRA GRIPES O RESFRIADOS

Es de lo más común y con lo que más nos automedicamos. Cuando tenemos síntomas de gripe o resfriados tiramos de medicamentos o corremos a la farmacia a hacernos con el que sea que pensemos nos hará paliar los síntomas y así poder ir a trabajar. La experta los desaconseja, sobre todo en el caso de los niños, ya que apunta a que «se recetan demasiado cuando no están indicados».
ANTIDEPRESIVOS

En cuanto a los antidepresivos, si bien son necesarios e incluso imprescindibles para casos graves, no lo es para los leves. El problema es saber el grado, pero el usuario no lo sabré calibrar y pensará que lo necesita si o si. “Como en España la atención psiquiátrica y psicológica es muy limitada se recure a ellos de forma exclusiva, cuando esto no representa una buena atención sanitaria”, lamenta la especialista.
COMPLEMENTOS DIETÉTICOS

No digamos nada en este sector, que muchos consideran prácticamente un fraude. De hecho, la ley obliga a el producto reconozca que no puede tratar, prevenir o aliviar enfermedades. Sin embargo, la publicidad indica lo contrario, y eso hace que el consumidor corra a las farmacias a por este tipo de productos.
Pero no solo apelan a lo dietético, sino que el comprador está convencido que con ellos se recargará de energía y vitalidad, como anuncian, o incluso beneficios para el corazón o enfermedades asociadas al cáncer. Un negocio millonario con el que hay que ser cautos.
PRODUCTOS HOMEOPTÁTICOS

Están muy relacionados con los productos anteriores que se venden en farmacias. Para la investigadora, es aún más sangrante este caso. Lamenta que haya en la actualidad todavía muchísimas personas que siguen pensando que los productos homeopáticos son remedios naturales o plantas medicinales, así como inocuos, e igual de eficaces y seguros que los medicamentos. Pero claro, pongámonos en el lugar del consumidor: ¿cómo no van a ser eficaces si se venden en farmacias? La excepción son ciertas plantas medicinales muy poco diluidas, pero sin ninguna evidencia científica en sus bondades. Al menos, no te van a perjudicar.
Lo más sorprendente es que están en una laguna legal, al no estar autorizados en realidad como medicamentos por la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS) pero sí se autoriza la comercialización.
PRODUCTOS ANTIMOSQUITOS

En este grupo hay de todo. Hay productos eficaces que se venden en farmacia y otros de que no, como los que se anuncian que funcionan por ultrasonidos, al no haberse observado en ningún estudio que repela a estos insectos. También apunta a las pulseras antimosquitos, que sí cuentan con sustancias supuestamente repelentes, pero cuya eficacia es nula o muy limitada. Muchos usuarios lo han denunciado pero sin embargo ahí siguen en los estantes de las farmacias.
PRODUCTOS BASADOS EN PLANTAS MEDICINALES

Un 25% de los medicamentos proceden de plantas. Es indudable el beneficio para la medicinal convencional, al margen que de que sea, con razón o no, la base de medicinas orientales como la china, coreana o india. Por tanto, hay que saber distinguir entre los medicamentos con plantas medicinales que han demostrado eficacia en ensayos clínicos y los preparados sin esos ensayos, aunque tienen el aval de una experiencia de 15 años en la UE como uso terapéutico.
Eso significa que, al estar ambas en las farmacias, en realidad estas últimas tienen una legislación privilegiada, al estar al mismo nivel las avaladas por estudios que las que no.
LO NATURAL NO TIENE POR QUÉ SER EFICAZ

Como han demostrado esos mismos estudios, o al menos en gran parte, independientemente de que se vendan o no en farmacias. Por eso parte de estos productos no deberían estar en los estantes. Samper es clara en este punto: «Si tienen un principio activo, un potencial efecto en el cuerpo humano, también lo puede tener como efecto adverso. De hecho, muchas pueden ser muy peligrosas para diversos colectivos como las embarazadas, los niños, los enfermos del hígado, entre otros, y hay que tener mucho cuidado con estos productos en estos colectivos, al mismo tiempo que si estas tomando otros medicamentos. Si alguna persona decide tomarlas debe consultarlo previamente con el médico o con el farmacéutico».

























































