El calor puede hacer que se hinchen los pies, y más si estamos utilizando unos tacones. Sin embargo, pocas pueden resistirse a lucir esos impresionantes zapatos o sandalias altísimas que tanto favorecen la silueta. En primavera y verano también se organizan muchos eventos, fiestas y celebraciones que requieren un protocolo y una etiqueta, y los tacones se convierten en un imprescindible.
Para evitar situaciones molestas como dolor de pies, e hinchazón, podemos aplicar una serie de trucos que pueden hacer que la jornada sea más cómoda. Eso sí, recuerda que no es aconsejable usar tacones con frecuencia, en tal caso, hazlo de forma puntual.
EJERCITAR LOS PIES

Hacer ejercicios específicos para fortalecer los pies puede ser de gran ayuda para evitar cualquier tipo de molestia, con cualquier tipo de calzado, incluso los zapatos de tacón. Los ejercicios más adecuados son los que ayuden a estirar la musculatura del pie y de la pantorrilla, así como movimientos para fortalecer los dedos y el tobillo. Caminar con los pies descalzos un buen rato al día también es muy eficaz para la salud general de los pies.
EMPIEZA CON LOS TACONES ANCHOS

Si el calor tiende a hinchar los pies dentro del zapato, esto todavía empeora más con los tacones muy altos y finos. Y la cosa se puede poner aún más fea, si no tenemos hábito de utilizar este tipo de calzado. Por muy bonitos que sean ese par de sandalias de tacón altísimo, es mejor ser realistas y pensar por nuestro confort y nuestra salud. Comienza con un tacón más bien ancho, que ofrezca mayor estabilidad y soporte. Las cuñas son también una buena alternativa, y se pueden encontrar todo tipo de diseños, desde las más informales hasta ls más elegantes.
MIMAR LOS PIES

Cuidar los pies antes de meterlos en los zapatos de tacón, es un gesto que puede marcar la diferencia. Con cuidar nos referimos a tratamientos exfoliantes para eliminar durezas, una pedicura adecuada, masajes relajantes, incluso un baño de pies en agua con sales o aceites esenciales. Así conseguimos que la piel esté hidratada y flexible, y reducimos el riesgo de rozaduras y ampollas.
HACER DESCANSOS CUANDO SE USAN TACONES

Si vamos a estar todo el día sobre unos tacones, conviene hacer descansos, aunque sean de unos pocos minutos. En estos descansos, podemos sentarnos y masajear un poco los pies para reactivar la circulación y evitar que se hinchen. Es un buen momento para aplicar un spray refrescante para pies y piernas, que suelen llevar ingredientes como mentol, que proporcionan un efecto de frescor inmediato muy revitalizante. Una vez en casa, se recomienda sumergir los pies en agua tibia con sal para desinflamar la zona y aliviar molestias. Además, es buena idea colocar los pies en alto durante unos 15 minutos.
EJERCICIO REGULAR

Ya sabemos que la actividad física es buena para todo, pero también puede ayudar a que no se hinchen los pies en verano. Correr, caminar, dar un paseo en bicicleta… cualquier tipo de ejercicio que ayude a estimular la circulación sanguínea y linfática. Si se sufre de piernas cansadas, el ejercicio regular también puede aliviar los síntomas.
ELEGIR BIEN LA TALLA

Parece una obviedad, pero no siempre elegimos la talla correcta. Si el zapato es pequeño, con el paso de las horas y la hinchazón del pie, empezará a apretar, provocando incluso dolores y ampollas. Y si es más grande de lo que corresponde, el pie se deslizará suelto, por lo que de forma instintiva se realizará más fuerza con el pie en cada paso, algo que suele terminar generando dolor, sobre todo en el empeine. Un truco bastante útil es probarse los zapatos por la tarde, cuando ya hemos caminado mucho y hemos realizado nuestras actividades cotidianas, es decir, cuando el pie está un poco inflamado de manera natural.
ZAPATOS BIEN SUJETOS

Los zapatos de tacón con tiras en el empeine o sujetos con pulsera en el tobillo son más fáciles de llevar porque el pie se siente más sujeto. Los modelos muy escotados y sin correas, provocan el mismo efecto que un zapato de talla mayor: el pie se fuerza para mantener sujeto el calzado, y al final causa molestias y dolor.
UTILIZAR ALMOHADILLAS EN LOS TACONES

Las almohadillas son un buen recurso para los zapatos de tacón. En el mercado existen un montón de modelos, que se pueden colocar por separado en las zonas más complicadas del pie, como el talón o la parte de debajo de los dedos. Proporcionan una pisada un poco más cómoda ayuda a evitar el dolor de los tacones muy altos. También existen plantillas refrescantes que pueden aliviar la sensación de hinchazón.