Recibir una multa de la DGT es una experiencia ambivalente. Por un lado, es indudablemente molesto: implica una sanción económica y la sensación de haber sido vigilado. Puede alterar nuestros planes financieros y generar frustración. Sin embargo, es crucial reconocer el propósito positivo detrás de estas sanciones. Las multas son una herramienta para fomentar la responsabilidad vial y garantizar el cumplimiento de las normas de tráfico.
A largo plazo, estas medidas contribuyen significativamente a salvar vidas, previniendo accidentes y promoviendo una conducción más segura. Así, la incomodidad inmediata se transforma en un beneficio colectivo invaluable. Y ahora, desde la Dirección, avisan que quieren poner fin a este tipo de apps a base de multas.
7Por eso desde el Ministerio han ordenado a la Dirección que incorporen una sanción a su reglamento para estas prácticas

Por ello, el Ministerio ha instruido a la Dirección General de Tráfico a incluir una sanción específica en su reglamento para abordar estas prácticas. Esta medida busca desincentivar la difusión de información sobre puntos de control de alcohol y drogas en plataformas como WhatsApp y Telegram. Pretenden así reforzar la efectividad de los controles y promover una conducción más responsable y segura. La implementación de esta sanción busca disuadir a los conductores de participar en actividades que puedan comprometer la seguridad vial y el cumplimiento de las normativas de tráfico.