La asociación Spainsif ha considerado este miércoles que el paquete de medidas de la Comisión Europea presentado el pasado junio y que incluye una propuesta de regulación de proveedores de criterios ASG (ambientales, sociales y de buen gobierno) promoverá la transparencia respecto a las metodologías y fuentes de datos para los usuarios, así como de los criterios de evaluación empleados por los proveedores.
Con motivo del encuentro ISR ‘Reglamento Europeo de Ratings ASG’, los ponentes han remarcado que estas propuestas legales, enmarcadas en el paquete de medidas de la Comisión Europea para fortalecer los cimientos del Marco de Finanzas Sostenibles de la Unión Europea (UE), buscan favorecer la independencia y aumentar la integridad de las operaciones de los proveedores de calificación ASG.
El presidente de Spainsif, Joaquín Garralda, ha indicado que la Comisión Europea pretende impulsar la transparencia de las actividades de calificación ASG para que contribuyan a alcanzar la descarbonización de la economía en 2050 y evitar el ‘greenwashing’.
Garralda ha destacado, además, que a la hora de impulsar este reglamento va a ser necesario «clarificar las fuentes y mejorar la ponderación de las metodologías y la comparabilidad de los datos entre las empresas para que los inversores puedan tomar las mejores decisiones de inversión en línea con sus intereses.
De su lado, el experto en finanzas sostenibles de Spainsif, Pablo Esteban, ha apuntado, como otros objetivos pretendidos por la normativa europea, la clarificación de los criterios internos de evaluación de los proveedores de ‘ratings’ para evitar posibles sesgos de interpretación, así como impulsar la independencia de los procesos y evitar posibles conflictos de interés con otros actores del mercado financiero.
Esto permitirá avanzar en la calidad y accesibilidad de los datos para que sean más robustos, como ha explicado Esteban, en tanto que, precisamente, los últimos avances en regulación otorgan mayor importancia al análisis de la doble materialidad y a la comparación de datos e índices ‘benchmarks’ (de referencia) ASG por parte de los usuarios.
Entre los retos existentes, el experto ha mencionado impulsar la gobernanza y la supervisión para preservar la independencia y evitar los conflictos de interés; lograr mayor confianza de los usuarios en estas calificaciones; conocer en qué medida el reglamento tendrá cierto grado de flexibilidad como para permitir adaptar los criterios y metodologías al dinamismo propio de la regulación; y clarificar las condiciones bajo las cuales se autoriza la prestación de los servicios de calificación ASG.
