El inmobiliario español activa las alarmas ante la caída de la inversión extranjera

El sector inmobiliario español se frena. La búsqueda de la inversión en plena subida de tipos de interés se ha convertido en una ardua y dura tarea en el sector inmobiliario español durante los últimos meses. Lejos queda ahora la fuerte subida debido a la pandemia y a unos supuestos cambios en los gustos de los inversores y particulares, quienes trataban de encontrar su techo en zonas retiradas, con piscina y amplios espacios para poder pasar el confinamiento lo mejor posible. En España, las salidas de moradores de las capitales más importantes para dejar su vivienda en alquiler o venta ha sido la tónica.

No obstante, al calor de las subidas de tipos de interés para tratar de enfriar la economía, reducir el ahorro de las familias y hacer frente a la escalada vertical de precios, el mercado inmobiliario español se paraliza. La escasez de oferta es ahora la tónica, pero se respaldó con la llegada de inversión extranjera. Llegados de todos los rincones, pero principalmente rusos, los extranjeros eran los únicos que podían permitirse la compra.

Pero este pilar para el sector inmobiliario se ha partido a raíz de la invasión de Rusia a Ucrania, con la confiscación de bienes y sanciones impuestas a los magnates del rublo, e incluso se ha paralizado aún más tras la crisis de Evergrande en China. La mayor economía de Oriente ha frenado en seco y los datos que arrojan sus exportaciones son más que preocupantes, con una caída del 20%. «Occidente tiene un gran volumen de stock en industrias y retail», han señalado fuentes del sector a MERCA2.

LA PARALIZACIÓN DEL MERCADO INMOBLIARIO ESPAÑOL

Si China no encuentra cómo volver a encender el motor por falta de demanda lo habitual es que sus inversores se mantengan cautelosos, más cuando la crisis de Evergrande podría desatar un tsunami financiero al ser el mayor emisor de deuda del país.

El mercado inmobiliario se resiste a bajar precios, mientras la inversión extranjera se enfría
El mercado inmobiliario se resiste a bajar precios, mientras la inversión extranjera se enfría

Ante esta situación, la compraventa de viviendas se ha desplomado y da por terminada la gran burbuja creada desde 2020, con precios de alquiler en máximos históricos y soluciones imaginativas para poder salir del paso -la venta de habitaciones para alquiler es una de ellas-. Otra muestra del parón del sector inmobiliario es la gran cantidad de anuncios para tratar de vender viviendas sin que haya clientes. «Vendemos o compramos su piso al contado», apunta un panfleto en el buzón de una vivienda en el Área Metropolitana de Barcelona (AMB).

La situación puede aún empeorar en este paralizado mercado. Los altos precios de la energía afectan a todos los países en mayor o menor medida, mientras la inversión extranjera en España se ve sacudida por unas tasas de interés del 4,5%, nivel no visto desde la crisis financiera de 2008. Todo ello incrementa la aversión al riesgo y provoca que los inversores se lo piensen dos veces antes de depositar el dinero en el ladrillo español, uno de los pocos países donde los precios no están en consonancia con las tasas oficiales del euro.

LAS ZONAS PRIME, ÚNICAS QUE SE SALVAN EN EL INMOBILIARIO

Las zonas prime en el inmobiliario residencial no sólo no han bajado de precio, sino que continúan aumentando, mientras que en las zonas con muy baja demanda, en la España despoblada, la caída supera los dos dígitos. Desde la oferta apuntan que Madrid, Málaga, Barcelona y Baleare, entre otras, se mantiene el atractivo, pero los precios solo están al alcance de la inversión extranjera.

Pocos podrán acceder a estos precios, pero las inmobiliarias se resisten a rebajarlos

Así las cosas, el número de transacciones por los inversores venidos de fuera se ha desplomado en un 7,5%, hasta las 67.983 operaciones, según los datos del Consejo General del Notariado, que da a conocer el volumen exacto. De esta forma y sin inversión extranjera, el mercado quedaría a merced del poder adquisitivo de los españoles, que se ha reducido un 20% desde los valores más elevados de la burbuja inmobiliaria.

LA INVERSIÓN EXTRANJERA EN BALEARES CAE CON FUERZA

De seguir esta tónica, el desequilibrio en el mercado inmobiliario sería aún más grave, con bajos salarios y precios altos para las viviendas. «Pocos podrán acceder a estos precios, pero las inmobiliarias se resisten a rebajarlos», destacan desde el sector. Baleares ya nota en sus arcas la caída de la inversión inmobiliaria, con un rejón del 32%, mientras Navarra roza el 20% y Andalucía, más de un 15% menos de inversión extranjera.

Actualmente, los precios no ceden y suben con cierta fuerza, hasta una media de 2.095 euros, mientras los españoles se acomodan a precios de 1.574 euros, un 25% inferior.

De nuevo, los ingleses son quienes llevan la voz cantante, con el 9,6% de las operaciones totales, mientras los residentes en Alemania y Marruecos, con el 8,1% y 7,3%, copan el resto del podio. A pesar de la invasión rusa a Ucrania, los ucranianos se han interesado por España, como también los rusos. Ambos han realizado un fuerte número de transacciones, más de 3.500.