El trastorno dismórfico corporal es una enfermedad mental en el que no se puede dejar de pensar en uno o más defectos percibidos o defectos en la apariencia, un defecto que parece menor o que no puede ser visto por los demás. Te enfocas intensamente en tu apariencia e imagen corporal, y revisas repetidamente el espejo, te aseas o buscas tranquilidad, algunas veces durante muchas horas al día. El defecto percibido y los comportamientos repetitivos causan un sufrimiento emocional significativo y repercuten en tu capacidad para desenvolverte en la vida diaria. Puedes recurrir a numerosos procedimientos cosméticos para tratar de «arreglar» el defecto percibido. Después, puedes sentir satisfacción temporal o una reducción en tu angustia, pero a menudo la ansiedad regresa y es posible que reanudes la búsqueda de otras maneras de arreglar tu defecto percibido.