La mousse de limón con la que parecerás un repostero experimentado

Hay pocos postres tan sabrosos y apetecibles como una mousse de limón. Cremosa, fresca y fácil de realizar, es perfecta para los días de verano en los que el calor nos anima a buscar dulces ligeros y fríos. Además, es ideal para sorprender a nuestros invitados.

En esta ocasión presentamos una receta de mousse de limón sencilla y rápida, pues con unos pocos ingredientes y algo de tiempo podrás lograr un postre casero digno de un chef.

Tipos de mousse

Características básicas de una mousse

Al contar con una historia tan alargada, han surgido muy diferentes y variados tipos de mousses aptas para todos los gustos y necesidades. Podemos dividirlas en mousses dulces y saladas, siendo estas primeras las que gozan de una mayor popularidad. Frutas, chocolate, dulce de leche, plátano, calabaza, café… Las variedades son infinitas.

Por otro lado, encontramos las mousses saladas, que suelen servir como acompañamiento a otros platos. Por ejemplo, encontramos la famosa mousse de salmón, muy frecuente en la alta cocina. La combinación de merluza y gambas también son habituales en esta fórmula.

Además, está la mousse de queso, espinacas, tomates, puerros, pepinos, guacamole, zanahorias, remolacha… Una de las grandes ventajas de la mousse es que admite un sinfín de variedades.