Las residencias de estudiantes de Barcelona, el último reducto al alza del inmobiliario

El lujo en las residencias de estudiantes se han convertido en el último reducto inmobiliario de Barcelona. Aparto, Domus, Vita y ahora el fondo alemán Patrizia han sido la última en sumarse a esta fiebre, debido a la práctica ausencia de pisos de alquiler y habitaciones para estudiantes en la Ciudad Condal. La gestora germana ha entrado en este sector por primera vez en España y lo hace con dos lujosas residencias, cuya ocupación está garantizada.

La gestora Patrizia ha comprado dos resisdencias, con un total de 635 plazas y unos 20.468 metros. La cartera incluye un edificio en Marina, en pleno 22@ de Barcelona, y otro en Poble Sec, en el barrio de Sant Antoni, uno de los más obreros y humildes de la ciudad. La falta de nueva construcción y proyección obligan a buscar oportunidades en los inmuebles ya reformados. De hecho, la elección del fondo alemán son dos inmuebles construidos hace trece y quince años, respectivamente, pero reformados ambos en 2017.

Los dos cuentan con gimnasio, hall, salas de reuniones y conferencias, así como piscinas en la azotea. Todo un lujo dentro de la Ciudad Condal. El primer edificio, en el 22@, tiene una oferta de 538 habitaciones, mientras que el de Poble Sec dispone de 97 camas. Los activos, que fueron construidos en 2009 y 2007, respectivamente, fueron totalmente reformados en 2017 y cuentan con servicios como un gimnasio, un hall, salas de reuniones, una sala de conferencias o cinco piscinas en su azotea. Ambos inmuebles se han adquirido a The Student Hotel. De hecho, el vendedor realizará la apertura de una nueva residencia en Poblenou el próximo mes de octubre, con una reserva casi agotada.

LAS RESIDENCIAS DE ESTUDIANTES, UN LUJO EN BARCELONA

La cuota mensual supera con creces el coste de una habitación en un piso compartido, situándose en los 1.000 euros por persona, mientras la estancia es prácticamente calcada a la de un hotel de cuatro estrellas, incluyendo mininevera, caja fuerte, escritorio, televisión y un baño. Todo ello, en unos 15 metros cuadrados. La oferta de pisos compartidos en Barcelona es muy escasa, con precios que se sitúan entre los 400 y 500 euros.

El poder de atracción de Barcelona: bajo coste de vida, pese a ser la ciudad con los pisos más caros de toda España, y un ingreso per cápita relativamente bajo

En los portales habituales apenas hay unos 800 anuncios para poder entrar, mientras que la demanda es más elevada, sobre todo en este curso donde la clase presencial vuelve a primar sobre el curso online. De hecho, en la zona del 22@ y del Paseo Marítimo, los alquileres de habitaciones alcanzan los 600 euros por persona, prácticamente el alquiler de un piso completo.

Residencia de estudiantes adquirida por la gestora Patrizia
Residencia de estudiantes adquirida por la gestora Patrizia

Fondos y gestores inmobiliarios han agotado todas las oportunidades de inversión en la Ciudad Condal. No hay obra nueva ni tampoco suelo para poder edificar. Por tanto, los precios se han disparado por la escasez de oferta. Ha ocurrido en todos los sectores, desde logística hasta residencial. Quienes venden lo hacen exigiendo precios desorbitados y mientras hay dinero con financiación habrá compradores. Esta situación se ha registrado especialmente en los hoteles, donde se llega a exigir más de 600.000 euros por habitación en algunas zonas.

Los fondos conocen la realidad de una marca Barcelona en declive. Y es que, la ciudad continúa siendo un imán para la educación y la formación. La gestora germana ha incidido en esta escasez para argumentar su inversión.

LA GESTORA PATRIZIA BUSCARÁ NUEVAS OPORTUNIDADES

«El atractivo cada vez mayor de ciudades como Barcelona entre los estudiantes extranjeros ha causado un escasez estructural de alojamientos para estudiantes de alta calidad en España», ha indicado Eduardo de Roda, director general para Iberia de Patrizia. En este sentido, sondeará nuevas oportunidades de negocio para poder continuar esta inversión, más cuando se inicie una recesión en la Eurozona. Y es que, las residencias de estudiantes se han convertido en un refugio garantizado para estos caseros.

La compra engrosa así la cartera de Patrizia en Europa, donde tiene inmuebles en Dublín, Hamburgo, Copenhague y Barcelona, ahora. Esta inversión se ha realizado en el último año, por un montante total de unos 470 millones de euros. La gestora ostenta cerca de 2.000 millones solo entre España y Portugal y pese a un momento incierto en la economía. Más, cuando se prevé el estallido de la nueva burbuja inmobiliaria ante el empobrecimiento de la población.

PATRIZIA SE FIJA EN LA PLAYA Y MONTAÑA DE BARCELONA

Según el gestor del fondo en España, las residencias se han convertido en uno de los sectores predilectos, con tasas de casi el 100% y con un mayor número de estudiantes respecto al 2019. Si bien, es de los pocos sectores con demanda fija y prácticamente inmóvil, ya que los estudiantes evitan vivir fuera de Barcelona.

El fondo se fija en Barcelona como una de las grandes ciudades de inversión por contar con «algunas de las mejores escuelas internacionales, universidades y escuelas de negocios de la UE«. Asimismo, hace referencia al «bajo costo de vida», pese a ser la ciudad con los pisos más caros de toda España, y al «ingreso per cápita relativamente bajo», la «tecnología» y «otros talentos» conllevan un «menor coste» respecto a los centros más grandes de Europa.

La Ciudad Condal es una de las mejor posicionadas dentro del selecto índice Patrizia, aunque no se encuentra entre las diez primeras del ránking. Sin embargo, los planes de «diversificación» de la «cuidadosamente planificada de Barcelona debería hacer que continúe puntuando en los indicadores de habitabilidad más importantes», ha sostenido. No obstante, continúa apostando por este centro debido a la «innovación, demografía, economía y conectividad». «Sus playas, montañas y el relajado estilo de vida catalán se mantienen firmes«, ha afirmado el fondo a sus inversores.