Agosto es el mes vacacional por excelencia pero lo relacionamos sobre todo con las vacaciones familiares o con amigos. Sin embargo, cada vez son más lo que viajan solo, y al contrario de lo triste que pueda parecer, es según los expertos una gran terapia psicológica y una gran experiencia que todos deberíamos probar alguna vez. Veamos los motivos por los que deberías hacerlo, aunque muchos ni se lo plantearían por miedo, vergüenza, posible aburrimiento…
UN CAMBIO DE MENTALIDAD QUE FAVORECE VIAJAR SOLO
En otras épocas, al que viajaba solo se le veía más como una persona rara o el típico hippie o artista digamos «sufriente» que huye del mundanal ruido y quiere sumergirse en tal o cual cultura o país. Sin embargo, hoy en día está cada vez más aceptado y es más recomendado por terapeutas y psicólogos incluso.
También está cada vez más arraigado en la gente joven. Y es que, al contrario de lo que pueda parecer en cuanto a que viajes solo para estar solo, puede ser lo contrario y marcarte como objetivo o acabar siendo sin proponértelo la situación ideal para socializar y conocer gente nueva.
