El truco para llevar tacones y que no te duela la espalda

Los zapatos de tacón tienen la virtud de aportar altura, estilizar la silueta y destacar la figura de una forma espectacular. Alargan visualmente las piernas resaltan la curvatura de la espalda y el glúteo. Hubo un tiempo en el que los tacones eran cosa de hombres, pero a partir del siglo XVII comenzaron a vestir también los pies femeninos. Hoy día es un calzado imprescindible en eventos de cierta elegancia, y es el complemento perfecto en los estilismos más formales. Estéticamente, son maravillosos, pero hay que reconocer que pueden llegar a provocar un buen dolor de pies y de espalda.

9
DEJAR LOS TACONES POCO A POCO

No se recomienda dejar los tacones de golpe, si se han utilizado diariamente durante mucho tiempo. La estructura del cuerpo ya se ha adaptado a la posición de este tipo de calzado, y hay que acostumbrarlo de nuevo a caminar de forma natural, para evitar dolores. Los tacones con el tiempo pueden acortar el talón de Aquiles, así como la musculatura de la pantorrilla. Un zapato plano de repente para caminar mucho, puede generar una gran tensión en toda esa zona y producir incluso lesiones.

Siguiente
Noemi A.
Noemi A.
Soy una apasionada de internet, las nuevas tecnologías y las redes sociales, adicta a la información y a aprender y descubrir algo nuevo cada día.