A partir del 14 de abril los autónomos que tengan más de 50 empleados deben cumplir con una nueva obligación, puesto que deben contar con un registro salarial cuyo principal objetivo es poder demostrar que las trabajadoras y trabajadores que ocupan un mismo puesto cobran igual.
Esta es solo una de la novedades que llegan vinculadas al objetivo de conseguir la igualdad en el ámbito laboral, pero no será la única ni la última. Está previsto que en los próximos años los autónomos tengan que asumir obligaciones que ya se han impuesto a las empresas, como contar con un Plan de Igualdad.
5El incumplimiento es una sanción grave
Como decíamos antes, incumplir la obligación de llevar un registro salarial puede implicar una sanción de hasta 6.250 euros para el autónomo, porque esta omisión está regulada como una infracción grave en la Ley sobre Infracciones y Sanciones en el Orden Social (LISOS).
En caso de que la Inspección de Trabajo descubra que no solo no se tiene un registro salarial, sino que además se está incurriendo en una discriminación salarial por razón de sexo, la infracción puede llegar a ser considerada como muy grave, lo que implica tener que hacer frente a multas de entre 6.251 y 187.515 euros.
