La Comisión de seguimiento y evaluación de los acuerdos del Pacto de Toledo del Congreso recibe este miércoles al Banco de España y mañana a la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF) en su regreso a los trabajos para cerrar sus recomendaciones sobre el sistema público de pensiones.
Así lo han decidido los grupos parlamentarios en su reunión de ayer, la primera desde el pasado mes de julio y la primera de las tres que tienen previsto celebrar esta semana a puerta cerrada, según han informado fuentes de la Comisión.
Este miércoles, la Comisión vuelve a reunirse a partir de las 10.00 horas, con la participación del gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos, y mañana, jueves, será el turno para la presidenta de la AIReF, Cristina Herrero. Estas reuniones serán a puerta cerrada.
Ya para la semana siguiente estaría prevista la comparecencia del ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá, posiblemente para el 7 de septiembre, si bien esta comparecencia aún no tiene fecha confirmada.
Los encuentros forman parte de la ronda de comparecencias que grupos como Vox habían planteado, de cara a la renovación de las recomendaciones, tarea en la que la Comisión lleva inmersa desde finales de 2016.
PREPARACIÓN DE SUS POSICIONAMIENTOS PARA CONCLUIR EN SEPTIEMBRE
Al irse de vacaciones en julio, los grupos se dieron de plazo el mes de agosto para preparar sus posicionamientos sobre las recomendaciones relativas al sistema de pensiones, con la intención de poder cerrarlas en septiembre. En julio, concluyeron el repaso de la veintena de recomendaciones, constatando «más coincidencias» y «ganas de trabajar» para rematar un documento final próximamente.
En un principio, podría lograrse el consenso sobre la recomendación segunda, que incluye como valor de referencia para la revalorización de las pensiones el IPC real, un punto sobre el que hubo discrepancias el ejercicio pasado y que se dejó fijado con acuerdo de todos los partidos, salvo ERC.
Una de las principales recomendaciones que estuvo cerca del consenso el año pasado fue la referida a poner fin al déficit de la Seguridad Social en el ejercicio 2025.
Otras propuestas pasan por elevar la dotación mínima del Fondo de Reserva del 5% al 7% del gasto anual en pensiones contributivas y supeditarlo a una regla de disponibilidad.
A su vez, otra opción es que el Estado pudiese compensar la falta de cotización de colectivos como el de las mujeres que de forma involuntaria hayan dejado de trabajar temporalmente para cuidar a hijos o personas dependientes vía Presupuestos.
