Rosa María Mateo ha superado todas las barreras admisibles de indignidad. Esta periodista con aura ‘carmenita’ fue escogida por Pedro Sánchez en julio de 2018 para pilotar la gestión de RTVE tras un obsceno pulso parlamentario entre PSOE y Podemos, que lucharon ante las cámaras por el control de la Corporación.
La intención de Mateo, decía, era devolver a los trabajadores de RTVE el control de los informativos, asegurar la independencia de los ‘Telediarios’ y llevar las riendas de la Corporación pública «de forma temporal» hasta que se resolviese un concurso para renovar su Consejo de Administración.
Pero Mateo comenzó con mal pie: Moncloa.com destapó que había inflado su currículum con una licenciatura de Ciencias Políticas de la que carecía y su falta de independencia quedó al descubierto por su gestión servil hacia el Gobierno a la hora de negociar los debates de la campaña de abril del año pasado (hecho que fue denunciado hasta por profesionales de TVE cercanos ideológicamente a ella como Xabier Fortes o Fran Llorente).
Y el asunto siguió con mal pie: el concurso para relevarla encalló, el fichaje de un comisario político como Enric Hernández ha dejado a los ‘Telediarios’ a pies del PSOE y Unidas Podemos, y la escasa palabra de la administración pública provoca bochorno: en marzo de 2019 Mateo aseguró que se largaría del cargo «en cuanto se forme Gobierno» y este lunes dijo que seguía en el puesto «por responsabilidad».
Por responsabilidad y por los 145.000 euros que se embolsa por manipular los ‘Telediarios’, hundir las audiencias de La 1 y enchufar a exministros como Màxim Huerta (que conduce el espacio diario menos competitivo del canal estrella de RTVE). Y por peor de todo: por utilizar a una empresa pública para hacer política y lanzar porquería contra adversarios del Gobierno con datos inexactos.
LA MAYOR VERGÜENZA DE MATEO
Televisión Española ha visto a lo largo de sus más de 73 años de vida todo tipo de atrocidades, manipulaciones políticas, censuras y ejercicios de amiguismo. Pero su memoria no albergará demasiados capítulos oscuros como el que ha protagonizado Rosa María Mateo.
Y es que en plena pandemia del coronavirus, con el Gobierno central negándose a tomar medidas drásticas tras ver se cortaban las barbas de vecinos como Italia, RTVE ha decidido volcarse en insultar a la sanidad madrileña con tal de esconder que Sánchez no se atrevió a suspender el 8M, ¡faltaría más!
Eso y que el Ejecutivo central está en shock y en manos de un técnico como Fernando Simón. Isabel Díaz Ayuso le ha mostrado por carta a Rosa María Mateo su «indignación» por «los ataques que ésta sufriendo» la Sanidad pública de la Comunidad de Madrid. La presidenta autonómica denuncia la cobertura de RTVE en una conexión realizada en la mañana de ayer en el Hospital La Paz.
TESTIMONIOS ESCOGIDOS POR INTERÉS POLÍTICO
«Sorprendentemente, Televisión Española no ha entrevistado al consejero de Sanidad de la Comunidad de Madrid, ni tampoco al director del centro, lo que me lleva a pensar que la elección del testimonio no ha atendido a criterios periodísticos», denuncia.
Díaz Ayuso mete el dedo en la llaga de Mateo: «Por el contrario, TVE ha escogido a un enfermero conocido por su activismo político, significado públicamente con el partido político Podemos y que, como era previsible, ha lanzado una arenga muy alejada de criterios técnico-sanitarios».
El testimonio, según la baronesa del PP, está «lleno de falsedades que no ha sido complementado con el de otros compañeros, médicos, técnicos sanitarios o cargos públicos. La del enfermero Guillén del Barrio ha sido la única entrevista que ha ofrecido la conexión, dando así la sensación que actuaba como portavoz del hospital o de la Sanidad Pública madrileña».
DEFENSA DE LA SANIDAD PÚBLICA
Es evidente que Del Barrio tiene derecho a defender la Sanidad pública en una tele publica, pero no es admisible que TVE solo otorgue voz a un profesional en un asunto tan complejo como este. Y menos aún que prive de la posibilidad a réplica a los responsables de la Sanidad madrileña.
Díaz-Ayuso ha explicado que su preocupación «es mayor toda vez que 24 horas antes TVE había hecho circular la noticia de que la Comunidad de Madrid había ‘perdido 3.300 profesionales de la salud. Una noticia que, como el testimonio antes citado, es completamente falsa y por la cual el ente que usted preside se ha visto obligado a rectificar«, explica Díaz-Ayuso.
Y remata la misiva: «Es muy lamentable que la televisión pública aproveche la mayor crisis sanitaria de la historia reciente de España para tratar de desgastar políticamente al Gobierno de la Comunidad de Madrid con datos falsos y argumentos tergiversados e incompletos. Espero sepa poner fin a tanta irresponsabilidad».