Fue una de las decisiones más controvertidas de la compañía: abandonar el negocio de los sedanes en Estados Unidos y apostar por los vehículos de mayor tamaño. Pero también ha sido de las más rentables. Ford ha sorprendido a Wall Street con ganancias superiores a lo esperado debido principalmente a la venta de vehículos utilitarios deportivos y camionetas a precios más elevados.
Las ganancias antes de impuestos en Estados Unidos crecieron en 2.000 millones de dólares pese a que Ford vendió menos vehículos. ¿Qué buscaron los compradores? SUV y pickups Serie F, mejor equipados, y a precios promedio más altos. Esto fue clave para producir unas ganancias ajustadas de 29 centavos por acción, superando así las estimaciones de los analistas. Las acciones de Ford subieron 5,9%.
“Vendimos menos productos de margen más bajo”, dijo el director financiero, Bob Shanks, a los periodistas en la sede central de Ford en Dearborn (Michigan), al referirse a los coches tradicionales. “Tuvimos un muy buen desempeño de la Serie F y también en los vehículos utilitarios deportivos de gran tamaño Expedition y Navigator”.
FORD GANA TIEMPO
La excelente combinación de ventas en Norteamérica podría hacerle ganar tiempo al máximo responsable, Jim Hackett, que se ve acosado por un éxodo de inversiones que llevó la acción al nivel más bajo en nueve años justo cuando inicia una reestructuración de 11.000 millones de dólares. Reformar a una compañía de 115 años de antigüedad, a la par que renovar productos envejecidos y prepararse para la nueva era autónoma, no es tarea fácil de ahí que no vaya a alcanzar un beneficio del 8% para 2020 tal y como había previsto.
Ford atribuyó este hecho al incremento de los costes, a la incertidumbre del sector, y acondiciones más difíciles en Europa y China. “Estamos trabajando para llegar a ese punto lo más rápido posible”, dijo Shanks, que no accedió a fijar un nuevo plazo para alcanzar el margen de 8%. “Dado el entorno en que estamos, hay más volatilidad de la que veíamos en el pasado reciente”.
“No es que no sepamos adónde vamos o que no sepamos cómo hacer las cosas”, dijo Hackett a los analistas en una reunión para hablar de los resultados financieros. “Es que es un compromiso enorme”.
Pese a las ventas más rentables en Norteamérica, las operaciones en el exterior siguieron siendo un freno para las ganancias, con pérdidas en Europa y Asia Pacífico. Shanks señaló que las pérdidas asiáticas se dieron en China, donde Ford se enfrenta con autos viejos y una cantidad insuficiente de SUV. En el resto de Asia, la automotriz ganó 190 millones de dólares con un margen del 9% “Nuestro desempeño en China ha sido claramente decepcionante”, dijo Hackett a los analistas, a lo que agregó que los máximos ejecutivos de la empresa están “enfocados en el tema”.