El regulador español ha vuelto a prorrogar la prohibición de realizar operaciones a corto en Liberbank hasta que finalice la ampliación de capital de 500 millones aprobada por el banco y como máximo, hasta el 30 de noviembre. Es la tercera vez que lo hace. Primero el 12 de junio y, posteriormente, el 12 de julio hasta el 12 de septiembre. Ahora lo ha vuelto a hacer hasta como máximo el 30 de noviembre.
La decisión de la CNMV con respecto a Liberbank contrasta con la actuación del regulador español con el Banco Popular, declarado insolvente por el BCE a primeros de junio y adjudicado al Banco de Santander por un euro horas después.
«La CNMV no hizo nada para parar los ataques especulativos contra el Popular. No prohibió los cortos pese a que alcanzaron casi el 10% del total. En cambio, ahora los prohíbe pese a que se ha demostrado que nada tuvieron que ver con la caída de las acciones del banco tras lo ocurrido con Popular», asegura un analista.
40% en diez días
En efecto, tras la intervención del Popular, la volatilidad de éste se trasladó a Liberbank, que llegó a caer más de un 40% en los días siguientes. De nada sirvió que el consejo del banco anunciara que había comprado en bloque títulos del banco para demostrar su confianza en la entidad, ni de que explicaran en un hecho relevante que el banco era solvente.
«El banco era solvente pero unas semanas después han anunciado una ampliación de capital de 500 millones de euros y la venta de activos inmobiliarios tóxicos. Entonces no era tan solvente ¿no?», explican expertos del mercado. Pese a la caída, que podía generar pánico y provocar la retirada de los depósitos del banco como sucedió en el Popular, las posiciones bajistas en Liberbank nunca alcanzaron el 1,4% del total.
El doble rasero del regulador en su comportamiento con los dos bancos ya fue origen de críticas antes del verano, sobre todo de los accionistas del Popular que perdieron toda su inversión de la noche a la mañana. Ahora la CNMV ha vuelto a echar un cable a Liberbank para evitar una nueva intervención europea ante la dificultad de que ninguno de los grandes quiera adquirirlo de momento.
El regulador se defiende asegurando que en el caso del Popular sí había cuestiones internas que podían justificar la especulación de los bajistas, algo que no ocurre en Liberbank y por eso decidieron la prohibición. El Gobierno respalda la decisión de la CNMV e incluso el ministro de Economía, Luis de Guindos, ha asegurado en numerosas ocasiones que tras el ‘rescate’ de Popular no hubo efecto contagio en el sector. «La especulación en el Popular no la quisieron parar y sin embargo sí lo están haciendo con Liberbank. La pregunta es por qué», aseguran fuentes del mercado.