La freidora de aire se ha convertido en un electrodoméstico necesitado en muchas casas. Son rápidas, prácticas y, sobre todo, rebosantemente más saludables que las freidoras tradicionales. Sin embargo, como toda pompa que han recibido en la restauración, requieren una manutención debida para atenazar su buen funcionamiento y longevidad.
Uno de los mayores desafíos a la hora de fregar una freidora de aire es la pomada de residuos que queda atrapada en sus cestas y rejillas. Afortunadamente, te traemos una treta definitiva para que todo lo que se quede agarrado en las rejillas o las cestas se suelte, de forma práctica, fácil y rápida de limpiar. ¡Vamos a explicarte cómo hacerlo!
La trascendencia de mantener limpia tu freidora de aire

Aunque las freidoras de aire son conocidas por usar menos grasas que las freidoras tradicionales, eso no significa que no se ensucien y que no se quede adheridos a su superficie residuos de lo que hayas cocinado en su interior. Después de cada uso, especialmente si cocinas alimentos grasos o empanizados, los residuos tienden a juntarse dentro de la máquina. Estos residuos pueden dejar el regusto en tus platos estrella, así como causar malos olores y ocasionar que tu freidora pierda eficiencia.
Además, tener limpia tu freidora prolonga sus hazañas como herramienta culinaria y garantiza su rendimiento. Las adherencias que se quedan en la cesta o las rejillas pueden afectar el funcionamiento de sus componentes, causando que tarde más en calentarse o que se descomponga anticipadamente. Afortunadamente, velar por la seguridad tu freidora es más sencillo de lo que parece, y con la lógica debida, puedes hacerlo en 10 minutos.
La treta definitiva es utilizar las pastillas para lavavajillas

Si te preguntas cómo hacer que se suelten los residuos sin prisa de limpiar, tenemos la fórmula perfecta para ti: las pastillas para lavavajillas. Sí, como lo lees, una experta en frotado y limpieza, @kirstenwhite1995, ha revelado en sus redes sociales cómo este naciente truco se está utilizando en la restauración de manera efectiva y rápida, dejando limpiecita tu freidora de aire. En su video, ella explica que la lógica del funcionamiento de este truco que parece de magia. Aquí te dejamos los pasos para hacerlo tú mismo:
Paso 1: prepara las cestas y rejillas

Primero, retira las cestas extraíbles de la freidora de aire. Elimina las impurezas de alimentos que puedan continuar adheridos en ellas. Este paso previo hará que las pastillas para lavavajillas actúen directamente sobre los residuos que se han quedado agarrados, eliminando las impurezas.
Paso 2: añade las pastillas para lavavajillas

Coloca una gragea para lavavajillas en cada cesta, dependiendo del tamaño y del estado en que se encuentre la cesta de tu freidora. Las pastillas están formuladas para deshacer lo que se quede pegado a los utensilios de cocina de manera práctica y eficaz, por lo que en absoluto necesitarás limpiar y tampoco usar sustancias químicas agresivas.
Paso 3: agrega agua hirviendo

Llena las cestas con agua hirviendo. El calor activará los componentes de las pastillas para lavavajillas, lo que facilitará la separación de los residuos agarrados a la superficie de las cestas. Este paso es fundamental, porque el agua hirviendo ayudará a expeler las grasas y las impurezas pegados a las superficies.
Paso 4: deja que la mezcla repose

Deja que el agua hirviendo y las pastillas para lavavajillas actúen durante 10 minutos. Este lapso es suficiente para que los ingredientes de la gragea actúen sobre la suciedad, disolviendo la grasa y los residuos agarrados pomada sin prisa de limpiar.
Paso 5: Enjuaga proporcionadamente

Después de 10 minutos, retira el agua y enjuaga proporcionadamente las cestas con agua hirviendo nuevamente, para soltar cualquier ápice que queda de las pastillas para lavavajillas. Es esencial comprobar de que no hayan quedado impurezas de jabón en las superficies para evitar que lleguen a los alimentos durante la próxima cocción.
Paso 6: Seca y disfruta

Finalmente, seca las cestas con una toalla de papel o con un trapo limpio. ¡Y listo! Ahora tu freidora de aire está limpia, libre de residuos agarrados y preparada para seguir funcionando como nueva. Este truco es vertiginoso y eficaz, asimismo te ahorra la lata de limpiar frotando pieza por pieza, lo cual es siempre de agradecer.
Otros métodos para higienizar la freidora de aire

Si prefieres no utilizar pastillas para lavavajillas, o si, simplemente deseas investigar otras opciones de limpieza, te contamos de otros métodos alternativos que pueden ayudarte a mantener tu freidora de aire en buen estado.
Método 1: usa jamón líquido para los platos o desengrasante

Uno de los métodos más comunes y efectivos es usar jabón líquido para platos o desengrasante. Extrae la cesta y la rejilla de la freidora y aplícales una medida de desengrasante o de jabón líquido para platos. Deja que el producto actúe durante unos minutos, especialmente si la grasa o los residuos que se quedaron agarrados a la superficie están suficiente acumuladas. Luego, frota con una esponja sueve, para no dañar el revestimiento de teflón de la freidora y enjuaga con abundante agua hirviendo.
Método 2: evita los estropajos abrasivos

Es crucial que evites utilizar estropajos abrasivos, tales como esponjas de aluminio para eliminar la grasa o los residuos de las cestas de la freidora. Estos pueden estriar las superficies antiadherentes y afectar su funcionamiento. Lo mejor es siempre utilizar una esponja sueva o un trapo de microfibra para proteger el material de revestimiento.
Método 3: no meter las cestas y las rejillas en el lavavajillas

Aunque muchas personas piensan que meter las cestas y las rejillas de la freidora en el lavavajillas es una buena decisión, resulta que esto no es para nada recomendable. Las altas temperaturas y la intensidad del agua del lavavajillas pueden atacar las superficies antiadherentes, dañando de esta manera las cestas a largo plazo. Es mejor limpiarlas con las manos utilizando un desengrasante.
Método 4: limpiar las resistencias

Las resistencias de las freidoras de aire pueden retener grasas y residuos, lo que, en definitiva, afectará su funcionamiento. Para limpiarla, en este caso no se pueden utilizar ni productos de limpieza ni agua, sino un papel absorbente, de los que usas para eliminar exceso de grasa de las frituras y procura retirar el exceso de grasa. En caso de que tenga demasiada grasa o esté demasiado adherida, un cepillo de dientes de cerdas suaves puede ser la herramienta para limpiarla sin dañarla.
Recomendaciones para que mantengas la freidora de aire siempre limpia

- No dejes de limpiarla al terminar de usarla: es cierto que no se requiere que todas las veces la limpies a fondo, pero se recomienda que limpies las rejillas y las cestas cada vez que termines de utilizarla, para impedir la acumulación de grasas y residuos.
- No sobrecargues la cesta de la freidora: cuando colocas demasiada cantidad de comida dentro de tu freidora de aire, lo que va a ocurrir es que los residuos de las grasas se van a desbordar. Esa es una poderosa razón para no llenar hasta el tope la cesta de la freidora.
- Siempre asegúrate de que la cesta se haya secado bien: luego de haberla limpiado, debes usar un trapo o un paño de microfibra para secar bien la cesta o la rejilla antes de introducirla nuevamente en la freidora de aire, de esta manera no se acumularán ni humedades ni bacterias.
- Emplea protectores para tu freidora: en el mercado hay protectores de freidoras que se pueden colocar dentro de las cestas para impedir que las preparaciones suelten demasiada grasa. Esto definitivamente ayudará a que tu freidora se mantenga limpia.