Hoy os vamos a enseñar algunos de los típicos errores que solemos cometer cuando cocinamos salmón. Si queremos evitar el desastre y disfrutar de uno de los mejores platos de pescado ricos y jugosos, deberemos seguir estos trucos que os contamos a continuación.
El salmón: de los mejores pescados
El salmón sí es uno de los pescados que fácilmente que podemos encontrar en cualquier tipo de pescadería de supermercado, y a un precio que no suele ser muy abusivo. Si a esto le sumamos que estamos hablando de un pescado de estos que nos recomiendan meter en nuestra dieta por el alto contenido en grasas saludables que tiene y proteínas de alto valor biológico, sin duda hablamos de uno de los pescados que más se suelen comer y sobre todo, de los que más se comen por parte de la gente que tiene poco tiempo para dedicarle a la compra de alimentos y a la propia cocina en sí.

Típicos errores al cocinar este pescado
Cuando hablamos de un alimento que solemos cocinar muy poco elaborado, como es el propio caso del salmón que normalmente se cocina a la plancha o al vapor, es muy fácil confiarse y que este resultado acabe siendo muy malo. No elegir bien el salmón es fundamental para esto. Tanto si compramos salmón congelado, como fresco, tenemos que tener claro que los mejores resultados los conseguiremos siempre con el fresco. Si hablamos de la coloración, aunque todo depende de la variedad de salmón que hablemos, cuanto más intenso llegue a ser el color, va a tener una mayor calidad.

La intensidad del color del salmón
Esto que hemos comentado anteriormente sucede en el caso del salmón salvaje, ya que en los de piscifactoría puede llegar a intensificarse el color mediante la alimentación que se les vaya a suministrar. Y por supuesto, cuando tengamos que saber si un salmón está fresco o no, se llega a aplicar todo lo que sabemos para conocer si un pescado pudiera estar fresco o no. Recomendamos sobre todo comprar el salmón entero, y que el pescadero pudiera prepararlo para congelar, separando la cola y cortando sobre todo algunas rodajas y dejando por otro lado los lomos y las ventrescas.

No descongelarlo bien
Tanto si hemos comprado una cantidad grande de salmón con intención de congelar o como si lo hemos comprado ya congelado, antes de que podamos comérnoslo nos tocará pasar por un paso inevitable, el de la descongelación y eso obviamente va a requerir una previsión y una planificación previa a todo. Tenemos que acordarnos de sacarlo del congelador y dejarlo en la zona de la nevera desde 24 horas antes del consumo. Antes de cocinarlo, en las brasas o en una sartén, tenemos que secarlo a conciencia con papel absorbente y esperar de alguna manera a que se ponga en temperatura ambiente. Y como no, evitar descongelarlo en el microondas.

Salmón a la plancha: quitarle la piel antes de nada
Independientemente de que vayamos a comernos la piel o no, que en el caso en concreto del salmón sí que sabemos que está crujiente y deliciosa, la piel suele ser una barrera de protección cuando vayamos a cocinar el pescado que nos ayude a retener los jugos y a poder mantener la carne tierna cuando lo vayamos a cocinar sobre esa misma piel. Aparte, si una vez que hayamos cocinado el salmón decidimos que no queremos comernos la piel, ésta será muy fácil de poder retirarlo con el tenedor.

No quitar las espinas del lomo
Otro de los trucos más importantes para cocinar bien nuestro salmón será el no quitarle las espinas de los lomos antes de hacerlo. Si tenemos un pescadero de confianza y agradable, se lo podemos pedir que nos lo haga por nosotros. Si no, nos merecerá mucho más la pena armarnos con unas pinzas y quitar las espinas. Esto es mucho más fácil de lo que puede llegar a parecer. A unas malas siempre podemos tener en nuestra cocina unas pinzas de depilar destinadas principalmente solo para este uso, aunque las específicas para espinas suelen ser un poco más grandes, por lo que nos facilita el agarre y son más accesibles de usar.

Salmón a la plancha: últimos trucos
Los últimos trucos para nuestro salmón serán los siguientes. Si lo que buscamos es un plato saludable y decidimos optar por hervir el salmón, en este caso no nos llegará a sazonar solo el pescado antes de cocerlo, sino que deberemos añadir dichos elementos que nos den buen sabor al agua, no solo sal y pimienta, sino algunos vegetales, unas pequeñas gotas de aceite de oliva virgen extra y alguna que otra especia, como el eneldo, la especia reina si hablamos de condimentar nuestro salmón. Para acabar, también tendremos que saber que no tenemos que marear el salmón con vueltas y más vueltas, y no dejarlo tampoco que se pase de cocción.
