Autopsia a una tableta de chocolate blanco, te contamos lo que lleva

El chocolate es un placer elevado al máximo exponente. Hay muchos adictos en el mundo al cacao. Entre estos hay que destacar tres subgrupos: los que consumen chocolate con leche, los que prueban el chocolate negro y los que adoran el chocolate blanco. Es cierto que de este último hay menos, quizás por su color.

Los fanáticos del dulce se atiborran de cualquier tipo de cacao. Este tiene muchos beneficios para la salud, pero realmente hay que comer el chocolate más puro para poder beneficiarse de ello. Sí te gusta el cacao blanco quédate con nosotros, pues te contamos todo sobre él.

Radiografía del chocolate blanco

chocolate

El cacao blanco es un dulce que está formado por manteca de cacao, azúcar y leche. La manteca de cacao es una grasa de origen vegetal que tiene un punto de fusión bastante elevado para mantenerla sólida en temperatura ambiente. Todo esto sirve para poder elaborar el cacao blanco. Se compone normalmente de un 20% de manteca de cacao, un 3,5% de grasa láctea, un 55% de azúcar y otros edulcorantes. En su contenido no tiene ni licor, ni pasta, ni tampoco sólidos del cacao.

el chocolate blanco no es chocolate.

Al no tener pasta de cacao o sólidos no tiene mucha teobromina (parecido a la cafeína). Las metilxantinas produce a nivel orgánico estimulación del sistema nervioso central, efectos en el corazón y broncodilatación. Estos estimulantes en algunos animales de compañía son tóxicos.

El cacao blanco es bastante rico en calcio. El primero que se vendió fue el chocolate de la compañía de Nestlé en 1930. Eran barritas muy pequeñas que se conocían como Milkibar. La idea de la empresa era sacar a la luz un sabor que fuera adictivo y con un punto de amargura.

No es cacao

El chocolate blanco no es cacao. Técnicamente es un derivado o subproducto del mismo ya que contiene pasta de cacao. Es rico en grasas y en azúcares. Al no tener pasta de cacao pierde los polifenoles. Todo ha dado muy mala prensa al chocolate blanco.

El cacao blanco se puede usar para elaborar repostería. Es algo difícil trabajar con este tipo de cacao, pues la manteca puede separarse y crear una pasta oleosa. Esta separación se puede recuperar con una emulsión fundiendo una cantidad pequeña de chocolate o manteca y mezclando. Es difícil también de teñir con los colorantes caseros. Se usa comúnmente para mousses, tartas o frostings.

Los chocolates blancos de mala calidad pueden ser de color más blanco y no tan marfil. Esto pasa porque se han usado grasas animales o vegetales, pero no manteca de cacao. El chocolate blanco tiene mucha vitamina A, potasio, hierro, zinc y magnesio. Posee también mucho calcio (100 gramos tiene 270 miligramos). El chocolate blanco es un alimento muy beneficioso para los huesos, por lo cual ayuda mucho a poder combatir afecciones óseas como es la osteoporosis.

Beneficios del chocolate blanco

Es muy recomendable en el embarazo (etapa donde se necesita más calcio de lo normal). Posee demasiadas calorías y por lo tanto no lo deben de comer las personas que tienen diabetes o que están en una dieta de adelgazamiento.

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Tiene grasas buenas. Estas son las que necesita el organismo para tener un mejor funcionamiento. Hay que consumirlo siempre con moderación. Ayuda mucho a los deportistas para cubrir todo el gasto energético.

Independientemente de sus valores nutricionales o los desafíos que da trabajar con él, lo cierto es que el chocolate blanco tiene muchos adeptos y es un alimento que los aficionados a la repostería y los reposteros usan en sus elaboraciones siempre. A pesar de todo ello recuerda siempre que el chocolate blanco no es realmente un chocolate como tal. Cuando quieres comer un buen cacao lo mejor que puedes hacer es tomar cacao que tenga un gran porcentaje en cacao.